Los cinco detalles en los que debes fijarte si de verdad pretendes conocer a alguien

¿Crees que eres bueno a la hora de calar a alguien y saber cómo es a pesar de que le acabes de conocer? De algún modo, todos tenemos cierta capacidad de intuir cómo es una persona por las cosas que hace o por cómo se expresa. De hecho, a más de uno le gustaría poder ser mejor a la hora de definir a los demás a partir de pequeños detalles, pues luego vienen las desilusiones.

En realidad, esta capacidad depende mucho de la persona a la que hayas conocido, pues algunas son más transparentes que otras. Hay que contar con el hecho de que, tras un año de pandemia, nos hayamos acostumbrado a llevar mascarilla y por ello no contamos con los gestos ni posturas faciales que añaden expresividad y significado a las miradas. Pero aún así, hay gente que asegura que tiene la clave para conocer cómo es una persona por dentro aunque apenas sepas qué le gusta o cuáles son sus aficiones.

Típica situación en la que estáis en un restaurante y se acerca el camarero: ¿Es cortés con él? ¿Le trata con educación? ¿Le hace alguna 'gracieta' molesta?

Así lo asegura Anthony J. Yeung, periodista estadounidense, quien ha escrito una inspirada columna en 'Medium' en la que revela cuáles son los trucos que aplica para saber si una persona es de fiar o nos traicionará a la primera de cambio y, por tanto, no vale la pena seguir conociendo. ¿Quieres aplicarlos a tu vida diaria? Lee con atención.

¿Cumplen lo que prometen?

No hace falta que te juren amor eterno nada más empezar. Yeung se refiere a los pequeños compromisos que trazamos con una persona nada más conocerla, como por ejemplo llegar a la hora a la que habéis acordado o seguir adelante con un plan que ya estaba establecido de antemano. En caso de que no sea la primera vez que incumplen estos pequeños acuerdos, te dará más pistas para saber que no siempre estará ahí.

¿Cómo tratan a las personas que están por debajo?

Típica situación en la que estáis en un restaurante y se acerca el camarero. ¿Es cortés con él? ¿Le trata con educación? ¿Le hace alguna gracieta molesta? Si no cumple con estas normas sociales es posible que sientas incomodidad al estar con una persona que no sabe dirigirse adecuadamente a gente que le presta un servicio en un determinado momento. Otro ejemplo es cómo actúa con los dependientes de una tienda. O los vagabundos de tu calle que se acercan a pedir. Si percibes que hay cierta hostilidad en sus palabras, no lo pienses más: esta persona o es un narcisista sin remedio o no es lo que esperabas.

¿Qué hacen cuando se equivocan?

En caso de que cometan un error, ya sea de manera accidental o completamente fortuita, debes observar con atención cuál será su siguiente reacción. ¿Se disculpan y se comprometen a evitarlo para la próxima ocasión? ¿Se inventa alguna excusa mala o se pone a la defensiva? O muchísimo peor aún: ¿te culpan y te acusan de ser tú la causa de su error? Evidentemente, si por el contrario ves que muestran arrepentimiento sincero y te piden una segunda oportunidad, la cosa cambia. Y tu percepción sobre esta clase de persona también.

¿Y si te equivocas tú?

Al igual que es importante atender a cómo reacciona una vez se equivoca también es imprescindible observar qué hace si el que ha cometido el error eres tú. ¿Te lo echa en cara? ¿Te riñe en exceso? ¿Te guardan rencor tiempo más tarde o piensan que ya no volverá a ser lo mismo entre vosotros? Evidentemente, dependiendo del grado de importancia y relevancia que tenga tu error, su forma de reaccionar será diferente. Pero si en tu fuero interno sabes que se trata de una bobada que no tiene mucho recorrido, es posible que ya sepas más sobre él y su manera de enfrentarse a los conflictos o problemas.

¿Se preocupan demasiado por su imagen en redes sociales?

Este bien podría ser un rasgo típico de una persona narcisista. Si necesita constantemente la aprobación de su red de contactos cada vez que subes algo relacionado con él a Internet o te riñe por haberlo hecho, puedes estar conociendo a una persona demasiado vinculada a la opinión de los demás. Esto no tiene por qué ser malo, pues ser coqueto no está reñido con la maldad. Pero aún así, si crees que su vida real dista mucho de la que tiene en el mundo virtual, es posible que esas mismas mentiras que se reserva para sus contactos también las aplique con sus amistades en la vida real.