Encuentran un billete de lotería premiado mientras limpiaban la casa

Cada cuarto jueves de noviembre, millones de familias canadienses y estadounidenses se sientan alrededor de un pavo a cenar. Con la resaca aún reciente del Día de Acción de Gracias, una pareja del estado de Louisiana ahora es un poco más feliz. ¿La razón? El boleto encontrado por accidente con un valor de 1,8 millones de dólares (1,58 millones de euros) tras meses durmiendo en el olvido.

Tina y Harold Ehrenberg se encontraban como cualquier otra familia a finales de noviembre: ultimando los preparativos para una opípara cena al calor del hogar y junto al resto de sus familiares y amigos. Su sorpresa fue que se encontraron con varios billetes de lotería antiguos en su mesa de noche, en los que no habían reparado hasta ese mismo día.

No tenemos pensado invertirlo en compras o en grandes viajes

A veces ser desordenado tiene sus ventajas. Es el caso de este matrimonio afincado en la localidad de Mandeville. Y justo a tiempo, ya que tan solo le quedaban al ticket dos semanas para caducar. Tina y Harold lo adquirieron para el sorteo del 6 de junio de este mismo año, y por ley los premios deben reclamarse en los 180 días posteriores al sorteo.

Una jubilación millonaria

"Lo más divertido fue depositar el cheque", asegura Harold Ehrenberg a 'USA Today'. Tras hallar el boleto entre una montaña de papeles, miraron en la página web de loterías para probar los números. Después de descubrir que efectivamente eran los ganadores, la celebración y la alegría inundaron su hogar el Día de Acción de Gracias. Con la reducción de impuestos correspondiente, recibirán 1,274.313 dólares netos (unos 1,121 millones de euros) que, según ellos, decidirán reservar para su jubilación.

"No tenemos planeado invertirlo en compras o grandes viajes", afirmó la pareja a 'The Independent'. Lo mejor, aseguran los expertos, es tomarse el éxito con tranquilidad y meditar bien en qué se quiere gastar el premio. Aunque todas las historias de los ganadores comienzan muy bien, muchas de ellas acaban de forma catastrófica. Hay una serie de casos más que desafortunados en los que los premios de lotería se convierten en una maldición. No han sido pocos los que se han llevado un disgusto tras haber recibido la mayor alegría económica de sus vidas.

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Es el caso de Evelyn Marie Adams, una empleada de la tienda de 24 horas de Nueva Jersey que ganó un premio de siete ceros. No una sola vez, sino por partida doble. Consiguió tanto dinero que tuvo que huir de su círculo social, ya que las solicitudes de ayuda por parte de su familia y amigos se multiplicaron. Luego, se hizo famosa, hasta el punto de no poder ir a ningún sitio sin que la reconocieran. "Algunos de mis familiares estaban muy enfadados conmigo solo porque tenía mucho dinero", le confesó a 'The New York Times'.

Al final, despertó en ella la peor adicción que puede sobrevenirle a una persona con grandes cantidades de dinero: la ludopatía. De esta forma, despilfarró una gran parte del montante total en los casinos de Atlantic City. Años después, el diario 'The New York Post' dio con ella y le preguntó cómo era su vida tantos años después. "Estoy en la ruina y tengo dos trabajos", admitió. "Mi consejo para cualquier persona que gane un premio es que primero contacten con su abogado y contable". Buena recomendación para esta familia del Día de Acción de Gracias. Que vayan haciendo cálculos y, ante todo, mantengan la calma.