El motivo por el que un hombre perdió brazos y piernas por el lametón de un perro

Un hombre de 48 años acudió hace unos días al hospital tras una noche de dolores, fiebre y vómitos. Él y su mujer pensaron que los síntomas estaban relacionados con un proceso gripal. Pero en tan solo una semana, los médicos tuvieron que amputarle las piernas y partes de las manos y de los antebrazos. No se trataba de una gripe. Nuestro protagonista sufría una infección causada por una bacteria llamada Capnocytophaga canimorsus, que le transmitió su propio perro a través de un lametón.

El capnocytophaga canimorsus es una bacteria gramnegativa que forma parte de la flora de las encías de los perros y de los gatos. Pero para ellos es una parte “normal” de la encía y no les causa ningún tipo de enfermedad. Es más, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, hasta el 74% de los perros, y el 57% de los gatos, tienen esta bacteria en su organismo.

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Pero en los seres humanos actúa de forma totalmente diferente. Si la bacteria llega al organismo de un humano puede causar infecciones en diferentes partes del cuerpo, incluso se puede presentar una infección en la sangre, conocida como sepsis, que provoca una inflamación en el cuerpo y, por tanto, un fallo general, empezando por las extremidades.

¿Cómo llega esta bacteria al organismo humano? Según los expertos del CDC, las personas con unsistema inmune debilitado son más propensas a contraer este tipo de infecciones aunque, según la doctora Silvia Muñoz-Price, estos casos son extremadamente raros.

Entre los síntomas se incluyen ampollas, enrojecimiento, pus, colitis, fiebre, dolor de cabeza, vómitos y dolor tanto muscular como articular.

"Más del 99% de las personas que tienen perros nunca tendrán este problema”, dijo la doctora. La bacteria se puede contraer a través de picaduras, arañazos o un contacto demasiado cercano con perros y gatos. Incluso un lametón de un perro puede ocasionarlo.

Los síntomas de esta infección se comienzan a experimentar entre los tres y los cinco días posteriores, aunque algunos pacientes afirman que los dolores y las molestias han aparecido a los 14 días del contagio. Entre los síntomas se incluyen ampollas, enrojecimiento, pus, colitis, fiebre, dolor de cabeza, vómitos y dolor tanto muscular como articular.

En los casos más extremos, la infección por capnocytophaga canimorsus puede llevar a la muerte del tejido. En estos casos se deben realizar las amputaciones pertinentes para salvar el resto del tejido corporal, que es precisamente lo que sufrió Greg.