Los hombres van a vivir los mismos años que las mujeres: esta es la razón

Es un hecho que parece comprobado: los hombres tendrán la misma esperanza de vida que las mujeres dentro de 14 años, es decir, para 2032. El motivo es muy simple: ellos fuman muchísimo menos que en años anteriores. A lo largo de los últimos cien años, los varones han vivido muchísimo menos que las mujeres. Esto se debe a algunos factores como las guerras, el trabajo en la industria pesada y el consumo de cigarrillos. En 2014, el Instituto Nacional de Estadística (INE) estimaba que las mujeres vivían seis años más que los hombres. Entre 1992 y 2002, la esperanza de vida de los hombres se situaba entre los 73,9 y los 79,4 años, y la de las mujeres de los 81,2 a los 85,1. Por todo ello, en los países desarrollados el género masculino ha vivido menos que el femenino, pero es algo que ha cambiado.

Al margen del tabaquismo, se han reducido los accidentes de tráfico y los niveles de obesidad se han mantenido

Un dato positivo y uno negativo. El primero nos indica que España es uno de los países con la esperanza de vida más alta, solo superado por Japón. El negativo: el tabaco sigue causando alrededor de 60.000 fallecimientos al año en España, según la agencia EFE. Hace un año, el 23% de la población española fumaba. El tabaco y la obesidad son los dos factores de mortalidad más comunes, ya que provocan grandes problemas en la salud como el cáncer o las enfermedades cardiovasculares, entre otros.

Un nuevo estudio, dirigido por Les Mayhew, profesor de estadística en Cass Business School, calculó cuánto tiempo viviría una muestra de 100.000 personas de 30 años si experimentaran las tasas de mortalidad promedio, proyectándolas hacia delante en el tiempo hasta que se encontraran. La investigación descubrió que dichas curvas de las vidas de hombres y mujeres se tocarían y se entrelazarían para el año 2032. "La caída del consumo de tabaco y alcohol ha beneficiado la proporción de los hombres, quienes tendían a fumar y a beber mucho más que las mujeres", afirmó Mayhew a 'The Guardian'.

"También hemos avanzado mucho en la lucha contra las enfermedades del corazón, que prevalece más en los hombres", apuntó el investigador." Y es mucho más probable que los hombres participen en conductas de alto riesgo (fumar, beber o llevar una mala dieta) o que mueran en accidentes de tráfico, cuyos índices han disminuido". Después de la II Guerra Mundial, el género masculino comenzó a ser un fumador empedernido. En la década de 1940, las cifras de la industria tabacalera revelaron que más de dos tercios fumaban. El femenino alcanzó su punto máximo veinte años más tarde, en 1960. Además del tabaco, la pérdida de empleos en la industria pesada, estadísticamente más peligrosa tanto a corto como a largo plazo, ha contribuido a bajar los índices.

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"A medida que la brecha entre sexos de esperanza de vida se reduce, nuestra comprensión de lo que significa ser un hombre y una mujer cambia", sostiene Danny Doorling, profesor de geografía en la Universidad de Oxford, a 'The Guardian'. "La diferencia entre los géneros también decrece debido a la introducción de la anticoncepción y la llegada de las mujeres al mercado laboral". Pero de acuerdo con el estudio, el aumento de la edad en ambos sexos no se distribuye de manera uniforme. El 5% de los hombres más longevos puede llevar a vivir un promedio de 96 años, casi 34 años más que el 10% de los menos jóvenes. En el caso de las mujeres, el 5% de ellas celebra su cumpleaños número 98, mientras que el 10% no llega a los 70.

Es más probable que mueras hasta ocho años antes si eres pobre que si vives en una situación económica privilegiada

A pesar de todo, los ciudadanos españoles podemos presumir de ser los más longevos, solo superados por Japón y Singapur. 'The Lancet' publicó en 2017 un estudio que reveló que vivíamos 10 años más que los demás países del globo. Las causas de este desmarque tan pronunciado es, entre otras, nuestro sistema público de salud, uno de los mejores del mundo en cuanto a prevención. Nuestra dieta mediterránea es otro de los factores que influyen, aunque el porcentaje de obesidad haya crecido en los últimos años. Por último, tener el privilegio de vivir en una sociedad pacificada, sin muchos índices de crímenes u homicidios. Por algo somos el tercer país de la Unión Europea con menor número de asesinatos (0,6 por cada cien mil habitantes).

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El factor económico

El estudio también revela que los hombres en las áreas más desfavorecidas morirán casi nueve años antes que los que viven en las zonas económicamente privilegiadas. Por parte de las mujeres, la brecha entre ricas y pobres será de siete años. La investigación utilizó las tasas de mortalidad después de los 30 para excluir los casos de muerte prematura, que cada vez son más inusuales en el mundo desarrollado. Pero morir joven también es mucho más probable si eres de origen pobre.

"La muerte temprana se convertirá cada vez más en un hecho aislado, pero las tasas de mortalidad altas para las edades más jóvenes seguirán siendo la norma, a menos que algo cambie de forma radical", advierte Mayhew.