Los menores latinoamericanos, menos obesos que los madrileños

Los niños de padres latinoamericanos que viven en Madrid son menos obesos que los nacidos en la capital, aunque la ingesta de grasas e hidratos de carbono sigue siendo demasiado alta en ambos colectivos.

Así lo demuestra el informe Estilo de vida y hábitos alimenticios de la población pediátrica latinoamericana y su implicación en la obesidad, publicado recientemente. El estudio revela que el 5% de los menores de origen latinoamericano sufre obesidad y el 9,3% tiene sobrepeso, mientras que en los niños madrileños estos porcentajes crecen hasta el 7% y 11% respectivamente.

El informe ha sido elaborado con 443 entrevistas a niños latinoamericanos de entre 3 y 13 años y residentes en 21 distritos de Madrid, y pone en evidencia que la ingesta de grasas en los niños de cualquier nacionalidad sigue siendo demasiado alta (un 44% de los nutrientes de la dieta diaria frente al 35% aconsejado por los nutricionistas) y los hidratos de carbono insuficientes (un 43% en lugar del 50% recomendado).

Observando estos factores y para evitar la obesidad posterior, uno de los coautores del estudio, Agustín Rivero, recomienda dar mayor importancia al desayuno que a la cena  y sustituir la bollería y el embutido, muy frecuentes en el desayuno y en la merienda de los niños, por cereales y fruta.

Más problemas cardiovasculares en Latinoamérica

Una de las motivaciones de esta investigación era averiguar si la alta incidencia de enfermedades cardiovasculares en los adultos latinoamericanos se podría deber a factores alimenticios durante su infancia, algo que ha quedado descartado, según explicó en la presentación de los resultados el también coautor del estudio Julio Sánchez.

"Se creía que esa mayor incidencia se debía a que su alimentación en la infancia era excesiva o poco equilibrada pero esto no es cierto, por lo que tiene que deberse a diferencias genéticas", explicó Sánchez.

En este sentido, recomendó que los pediatras lleven a cabo un seguimiento de patologías como la diabetes a lo largo de toda la infancia, con el fin de garantizar una "mejor calidad de vida" en su edad adulta.

Según los investigadores, la combinación de distintas culturas alimentarias puede tener un efecto beneficioso sobre la dieta, por lo que han aconsejado promocionar la dieta mediterránea al mismo tiempo que promover la adopción de algunos de los rasgos de la gastronomía latinoamericana entre los españoles, como la de dar mayor importancia al arroz o consumir frutas tropicales con mayor frecuencia.