La vida de un niño autista

“Quería contar qué era el autismo de una forma sencilla. Quería transmitir un mensaje que no fuera triste. Nuestro hijo autista se sitúa en una burbuja de luz que puede ampliarse cuando su hermana consigue ponerse en contacto con él”.

La idea de grabar un cortometraje partió de Frédéric Philibert, padre de dos niños, uno de ellos autista. Pensó que su propia hija sería la candidata perfecta a poner la voz en off a esta película que cuenta cómo es su “hermanito raro”. “Queríamos mostrar gráficamente el aislamiento de nuestro hijo, que vive a nuestro lado pero jamás verdaderamente con nosotros”.

Vive, dice su padre, como en una burbuja. Según la niña, es “un hermanito bajado de la luna”. El cortometraje ha sido difundido gracias a la Fundación Orange y está producida por Sacrebleu Productions.