Es noticia
GTI Cabrio, combinación ideal
  1. Motor
PRUEBA VOLKSWAGEN GOLF GTI CABRIO

GTI Cabrio, combinación ideal

El Golf es un coche legendario a punto de cumplir sus 30 millones de unidades vendidas. La marca alemana ha combinado, por primera vez en la

El Golf es un coche legendario a punto de cumplir sus 30 millones de unidades vendidas. La marca alemana ha combinado, por primera vez en la historia, dos versiones casi igual de emblemáticas, la GTi que se mantiene casi desde su lanzmaiento, con la versión Cabrio.

Y el resultado es genial, un compacto de cuatro plazas, de prestaciones y comportamiento muy deportivo pero al mismo tiempo fácilmente manejable, al que se suma el tener un techo descapotable. Una combinación realmente genial por un precio de partida de 36.450 euros.

La pasada primavera, solo unos meses antes de la presentación del nuevo Golf, el séptima generación en el Salón de Francfort, la marca alemana presentó el primer Golf GTi Cabrio de la historia, un modelo por supuesto basado en la sexta generación del modelo compacto por excelencia.

El vehículo, que es el que hemos probado en esta ocasión, es realmente genial porque combina dos características que siempre suelen ir muy separadas, como el lujo y la diversión propia de un coche con el techo descapotable de cuatro plazas, pero al mismo tiempo con el comportamiento de un GTi.

Ese comportamiento de la versión más deportiva del Golf, si descontamos la variante R más radical, supone una auténtica referencia en el mundo del motor. Suspensiones firmes, motor turboalimentado de 210 caballos pero de una gran elasticidad, una dirección muy precisa, a la que en esta ocasión nuestra unidad de pruebas sumaba otro valor añadido más, el de su cambio DSG. 

En el mercado hay pocos modelos comparables con este Golf GTi Cabrio, que aúna un tamaño compacto, buenas prestaciones y cuatro plazas. De un lado su hermano el EOS, bastante parecido pero cuya diferencia principal radica en su techo rígido en vez del de lona que incorpora este Golf. Por otra parte también es un rival el BMW Serie 1 en su variante Cabrio. Son dos coches que pueden resultar muy próximos al Golf pero en ambos casos no disponen de la imagen del Golf GTi Cabrio.

Este vehículo no deja de ser un Golf GTi y de ahí que incorpore la tapicería más clásica del Golf GTi, esa en un tono gris con cuadros que es la más característica del modelo alemán. Esa tapicería tan particular le convierte, junto a sus siglas GTI, en un verdadero mito de 4 ruedas.

En el habitáculo encontramos cuatro plazas reales. Las dos delanteras son muy amplias, mientras que las traseras, son quizá algo justas en altura cuando está la capota puesta, pero este pequeño inconveniente desaparece con su techo. La anchura de estas plazas traseras es muy buena, con dos amplias plazas marcadas tanto en la banqueta como en el respaldo.

Y a esto se suma su capota, por supuesto de lona, como siempre ha sido en los Golf Cabrio. Una capota que es de accionamiento totalmente automático mediante un botón y que no requiere desenganchar ninguna pieza ni nada parecido, como ocurre en otros modelos. En este caso es totalmente automático y se pliega en unos 10 segundos.

Además, esta operación se puede realizar hasta los 30 km/h. Y esto resulta interesante para aquellas personas que aprovechan cada rayo de sol para descapotar su coche, y ocurre que empezamos a abrir el techo con el semáforo en rojo, pero este se pone verde y hay que seguir avanzando.

Un aspecto que hay que tener en cuenta es que, como es tradición en los Golf Cabrio, no hay una tapa que proteja el techo una vez plegado, sino que queda plegado en la parte trasera pero con los pliegues propios del cierre y sin una excesiva protección. Es así.

Pese a ser un coche descapotable, ofrece una muy buena rigidez de la carrocería. De hecho, después de realizar esta prueba les puedo asegurar que en zonas muy viradas, donde más se pone a prueba esta rigidez de la carrocería, el GTI Cabrio se comporta exactamente igual que la versión cerrada, que es una referencia en este aspecto.

De sus hermanos Golf Cabrio hereda una barras de seguridad situadas por detrás de los reposacabezas traseros, que en caso de un accidente con posible vuelco se accionan mediante unos resortes para proteger a los ocupantes del vehículo. E igualmente para ofrecer la máxima seguridad a sus ocupantes en caso de accidente tiene un marco del parabrisas reforzado.

Es, como les decía anteriormente, un vehículo de cuatro plazas. Con él, cuatro personas pueden viajar muy a gusto con el techo cerrado, pero para ir con él abierto la velocidad debe ser moderada. Las plazas delanteras van bastante bien protegidas, pero en las traseras las turbulencias, por encima de los 120 km/h, son excesivas.

El vehículo ofrece como una opción un deflector que elimina de hecho las plazas traseras que cuesta 325 euros. De esta forma se puede rodar más deprisa sin que el viento cree demasiados problemas. La operación de quitar y poner este “derivabrisas” es muy sencilla, mediante cuatro anclajes, pero llevarlo en el coche, aunque tiene su funda, nos quitará algo de espacio del maletero y en ese sentido el coche no va muy sobrado.

Es, como su hermano el GTi cerrado, un vehículo rápido, de buenas aceleraciones gracias a su motor de 210 caballos, pero que no es un coche muy exigente en cuanto a conducción. Salvo que nos propongamos hacer excesos el coche es muy racional y efectivo gracias a su diferencial XDS que facilita la entrada en las curvas cuando estamos rodando rápido en una zona virada.

El Golf GTI Cabrio solo ofrece dos variantes, con cambio manual de seis marchas o con un interesante DSG de doble embrague. Nuestra unidad de pruebas estaba equipada con este cambio más eficaz y deportivo que permite combinar el uso manual con una conducción más relajada en momentos de atasco o de conducción tranquila por la ciudad en el modo automático.

Este nuevo modelo de la marca alemana se sitúa como un auténtico icono, como un coche  ideal para personas que buscan disfrutar al volante pero que también quieren tener un coche con una historia y que ya forma parte de la leyenda del automóvil.

Un coche divertido y hasta deportivo cuando interesa buscar las prestaciones, que están siempre disponibles gracias a su motor de 210 caballos y a sus suspensiones de tarado muy deportivo, pero que igualmente permite rodar tranquilo a velocidad moderada con el techo abierto disfrutando del paisaje o de una buena mañana de primavera o del otoño soleado que a veces tenemos en España.

Por lo que se refiere a su maletero, es razonablemente bueno. Tiene una capacidad de 250 litros, pero lo mejor es que da igual que el techo esté puesto o quitado y eso es por la forma en la que se pliega en la parte trasera, que no afecta para nada al volumen del maletero.

Cuando hay que llevar algo más largo o necesitamos más volumen, se puede plegar el asiento trasero y ocupar parte del habitáculo. El plegado es independiente para cada asiento por lo que se puede eliminar solo una plaza o las dos para aumentar dicho volumen de carga en función de las necesidades. 

Su equipamiento es bastante completo para el segmento en el que se integra, faros bi-Xenon, luces diurnas, climatizador bizona, ayuda al arranque en pendiente y por supuesto control de estabilidad, que en este modelo incluye de serie el diferencial XDS, un sistema electrónico que actúa como si fuera un diferencial  autoblocante y que proporciona un comportamiento más dinámico e incluso, más deportivo, en zonas viradas.

Y también sus llantas de aleación de 17 pulgadas, de serie. Sin embargo, las vistosas llantas de nuestro coche de pruebas, las más típicas del Golf GTi, son de 18 pulgadas y tienen un coste de 645 euros.  Además, no les aconsejaría estas llantas, porque con ellas, al tener un perfil de neumático aún más bajo (40), la suspensión se hace excesivamente dura, y al tener menos deriva su neumático el comportamiento es más brusco en zonas de curvas y con baches. Y también hay más peligro de rotura si hay algún bache. 

Hay que hablar de precio, y no se puede decir que sea barato. El Golf GTi Cabrio cuesta 36.450 euros, es decir unos 4.000 euros más que la versión cerrada del GTi. En cuanto al cambio DSG, en su variante de seis marchas que es la disponible para este modelo, supone un sobreprecio de otros 1.900 euros, pero creo que merece la pena.

El Golf es un coche legendario a punto de cumplir sus 30 millones de unidades vendidas. La marca alemana ha combinado, por primera vez en la historia, dos versiones casi igual de emblemáticas, la GTi que se mantiene casi desde su lanzmaiento, con la versión Cabrio.