Mini Clubvan, reparto con clase

Mini mostrará en el próximo Salón de Ginebra el Clubvan, un concept basado en la carrocería del Clubman pero con un enfoque de vehículo comercial, eso sí, con mucho estilo. Un coche pensado para el reparto urbano pero con la clase que impone Mini a sus vehículos.

Está desarrollado sobre la base del Clubman, la variante de carrocería alargada que incorpora una segunda puerta más pequeña en el lado del acompañante. Y también con un maletero algo más grande. Pero en este caso el asiento trasero se elimina para dejar en su lugar una amplia zona de carga.  Además, el doble portón trasero que incorpora permite una operación más fácil de carga y descarga de las mercancías.

Desde la marca se asegura que las propiedades dinámicas del vehículo no se ven alteradas con la nueva carrocería, por lo que este modelo puede combinar el dinamismo de Mini con las posibilidades de utilización de un vehículo de uso comercial.

Las ventanillas traseras son traslúcidas lo que permite llevar carga sin que desde fuera queden a la vista. Y la rejilla situada detrás de los dos asientos delanteros permite un amplio vano de carga y proporciona al conductor la seguridad de que esos objetos no lleguen a golpearle en alguna maniobra.

Un vehículo como este podría ser ideal para un diseñador de alta costura, o un propietario de una galería de arte o proveedores de catering para eventos especiales. Y también resultaría ideal para tiendas en barrios muy lujosos de las ciudades en los que las típicas furgonetas quedan un poco fuera de lugar.

Sin duda lo que ha primado a la hora de desarrollar esta versión ha sido conseguir el máximo espacio de carga. El compartimiento de carga empieza en la rejilla de separación que se encuentra justo detrás de los dos asientos. Este elemento separador es macizo en su parte inferior mientras que en la zona superior es de rejilla para proporcionar la mejor visibilidad.

La puerta trasera del lado derecho se abre en sentido contrario y permite acceder cómodamente a cualquier parte del interior del coche. Gracias al modo de funcionamiento de esta puerta, es posible introducir y retirar objetos de menor tamaño desde un costado del coche.

Este concepto de vehículo comercial derivado de un Mini no es nuevo. En realidad, con la primera generación del Mini, a finales de los años cincuenta, ya llegó una variante de este tipo, el Morris Mini Van. En aquel caso, para conseguir una mayor capacidad de carga se amplió la batalla en 10 centímetros. Corresponde a la imagen que pueden ver aquí al lado. Esta versión fue también la base de la versión Morris Mini Traveller, un vehículo pensado para cuatro pasajeros pero con ventanillas más grandes e ideal para viajes.

Tras su presentación en el Salón de Ginebra ya se podrá saber algo más sobre si este coche supondrá una nueva variante en la gama de Mini que se venga a sumar a una familia muy numerosa en la que ya están el Mini, Mini Cabrio, Mini Clubman, Mini Countryman, Mini Coupé y Mini Roadster.