Los 'jurados vecinales' de Carmena solo mediarán en conflictos de convivencia

Los denominados 'jurados vecinales' están incluidos en el Plan Director para la Policía Municipal presentado hace meses por el equipo de Gobierno que dirige Manuela Carmena. Este documento está enfocado a acercar a la ciudadanía la labor de los agentes municipales y mejorar la convivencia en la ciudad, según el concejal de Seguridad y Emergencias, Javier Barbero. La información que este martes publicó el diario 'El País' afirmando que el consistorio creará un nuevo modelo de seguridad con jurados vecinales en que "infractores, delincuentes y víctimas tendrán la oportunidad de encontrarse, reconocer su culpa y acordar conjuntamente vías para restaurar el daño hecho a la comunidad" desató la polémica mientras tenía lugar el debate del estado de la ciudad.

La iniciativa de los jurados y de la creación de los llamados 'gestores de barrio' -habría 121 en total, uno por distrito- sería función de la recién creada policía comunitaria, una de las novedades del citado Plan Director que cuenta con una estructura propia. Los gestores están llamados a ser una persona conocida en cada barrio para "impulsar y fortalecer" la gobernanza en los distritos. Los gestores, en todo caso, dependerán tanto del concejal del distrito como del de Seguridad, Javier Barbero, y constituyen un plan piloto que se iniciará en Lavapiés.

Sin embargo, el equipo de Gobierno ha matizado la capacidad de actuación de la policía comunitaria, desmintiendo que los delitos penales puedan solucionarse a través de ese cauce. Los agentes comunitarios se ceñirán a labores de mediación y a cuestiones de gestión de la convivencia.

La idea pasa por solucionar conflictos vecinales "de manera comunitaria", siempre y cuando no existan delitos penales, cuya responsabilidad recaerá solo en un juez ordinario. Un ejemplo sería la existencia de un conflicto entre vecinos y empresarios por una cuestión de ruido. Entonces se reunirían los vecinos afectados y la persona encargada del bar en cuestión, acompañados de agentes mediadores para tratar de llegar a una solución común y satisfactoria para ambos.

Críticas de la oposición

La portavoz municipal de Ciudadanos insistió en "no salir" de su "asombro" al conocer la noticia de los jurados vecinales. Begoña Villacís criticó al equipo de Gobierno por "no tener claro cuál es la competencia del Ayuntamiento", puesto que "afortunadamente ya tenemos jueces y policías". Además, la dirigente de centro aseguró que los 121 gestores de barrio les "parecen una red clientelar. Se tejen su propia red para que dentro de tres años haya mucha gente que les deba muchas cosas", afirmó.

En la misma línea, Esperanza Aguirre insistió en que, a su parecer, "es un perjuicio para todos los madrileños". La propuesta, a ojos de la jefa madrileña popular, "quiere poner la responsabilidad de la seguridad, que está clarísimo que la tienen los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado y la Policía Municipal, en unas personas nombradas por Ahora Madrid". La socialista Puri Causapié aseguró que el proyecto de la policía comunitaria "o está muy mal contado o está muy mal planteado, porque juzgar solo debe hacerlo el poder judicial". Aun así, la portavoz del PSOE-M insistió en que "si se trata de mediación, existen los servicios sociales, que la desarrollan en coordinación con la Policía Municipal". Causapié se mostró partidaria de que todas esas funciones las desarrollen "funcionarios del consistorio".