Carmena crea una unidad policial para "gestionar la diversidad" de Madrid
El nuevo Plan Director de la Policía Municipal pretende "adaptar la función policial a las propias demandas de la ciudadanía"
El equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Madrid ha cumplido su promesa. Tal y como adelantó El Confidencial, el concejal de Seguridad Javier Barbero ha incluido en el denominado Plan Director -que marca las líneas del modelo policial que pretende diseñar el consistorio- la creación de una Unidad de Gestión de la Diversidad, que trabajará para integrar a las minorías, y de otra Unidad contra los Delitos de Odio.
"Se trata de adaptar la función policial a las propias demandas de la ciudadanía; por ello se desarrollarán varias líneas claves para potenciar la gestión policial en asuntos de diversidad de género y raza, delitos de odio, convivencia y prevención, atención a la población vulnerable (mayores y menores), violencia machista, doméstica e intrafamiliar y protección medioambiental, entre otros objetivos", señala el consistorio en un comunicado que resume el mencionado Plan Director.
Para desarrollar estas líneas maestras, continúa el ayuntamiento, "ha sido necesario crear una nueva estructura orgánica del cuerpo", que incluye la puesta en marcha de las dos unidades mencionadas y la desaparición -también anunciada por El Confidencial- de las Unidades Centrales de Seguridad (UCS), que "se integrarán en la Unidad de Apoyo a la Seguridad", centrada en atender emergencias y grandes eventos en colaboración con la Policía Nacional.
El Ejecutivo municipal pretende que la Policía y los ciudadanos estén más en contacto. "Se señala la participación de la ciudadanía en la propia seguridad de la ciudad como un factor indispensable paa que se alcancen niveles de calidad altos en la convivencia", aseguran desde el consistorio. "El Ayuntamiento de Madrid entiende que la Policía Municipal es una pieza clave en el proceso de reforma y desarrollo de políticas de seguridad inclusivas, basadas en aspectos preventivos y comunitarios", reza el citado comunicado.
En concreto, el Plan Director pretende que la Policía Municipal sea comunitaria, preventiva, próxima, democrática, cooperadora, que tenga transparencia interna y que esté orientada hacia la resolución de problemas. Según el documento, publiciado en la web del consistorio, el nuevo modelo por el que apuesta el equipo de Manuela Carmena "huye de dos extremos: el que entiende que todo problema de orden político o social se ha de atajar casi exclusivamente por la vía policial en su versión más reactiva y, en segundo lugar, aquel que piensa que la policía ha de dejar que actúen las instituciones sociales, exclusivamente, porque a ella no le compete la dimensión social, a no se que se caiga específicamente en un delito, actitudes excesivamente simplistas para problemas complejos".
La reacción de los policías por el momento ha sido cauta. Nada que ver con la que inicialmente mostraron algunos colectivos dentro del cuerpo, que nada más conocer la noticia de que el Ayuntamiento iba a formar a los funcionarios para gestionar la diversidad reaccionaron con recelo, ya que no son pocos los cursos y la experiencia que tienen los policías municipales para tratar con minorías, víctimas o ciudadanos desfavorecidos, que son el pan de cada día de su trabajo.
Desde el sindicato de funcionarios CSIF valoran negativamente el Plan Municipal presentado por el consistorio fundamentalmente porque, a su juicio, "no es viable sin personal y con una plantilla envejecida". Según la organización sindical, la edad media de los funcionarios que conforman la corporación supera actualmente los 46 años.
El equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Madrid ha cumplido su promesa. Tal y como adelantó El Confidencial, el concejal de Seguridad Javier Barbero ha incluido en el denominado Plan Director -que marca las líneas del modelo policial que pretende diseñar el consistorio- la creación de una Unidad de Gestión de la Diversidad, que trabajará para integrar a las minorías, y de otra Unidad contra los Delitos de Odio.