Moreno, griposo, ‘vende’ hiperoptimismo de mayoría absoluta delante del jefe Rajoy

Embalado por un proceso febril galopante, el griposo Juanma Moreno se abona a la euforia. Si contabilizara ahora mismo los mismos votos que consiguió Javier Arenas en 2012 la mayoría absoluta no se le escapa. Esa es su previsión. Delante del jefe Mariano/Rajoy no era plan de lanzar su perfil bajo (bueno, su voz sí que lo era). En un hiperoptimismo sin límites, Moreno ya se ve entrando en el Palacio San Telmo, a pesar de su escaso énfasis en el discurso, monocorde, con muchos datos e ideas-fuerza, pero sin apenas garra. ¿De verdad que tiembla Susana Díaz?

Rajoy escucha los 21 minutos de discurso de Moreno sin probar (al menos delante de las cámaras) ni un centilitro del zumo de naranja del Ritz. Esto es el Fórum Europa Nueva Economía. El salón Real y el Alfonso XIII acoge a 700 personas, cuatro ministros: Cristóbal Montoro, Rafael Catalá, Fátima Báñez y Alfonso Alonso. En la lista están confirmados 24 embajadores, pero las caras son todas nacionales. No se oyen acentos lejanos, sino más bien sureños como el de Juan Ignacio Zoido, alcalde de Sevilla, que ha venido a Madrid para fiturear en la feria internacional, como el alcalde de Huelva, Pedro Rodríguez, o el alcalde de Córdoba, José Antonio Nieto.

Corbata verde y traje azul marino. Y la bandera andaluza de las columnas de Hércules situada en un lugar preminente, mucho más que la española. Esta es la presentación visual del candidato del PP a finiquitar 32 años de socialismo en Andalucía, el que acusa a Díaz de no acabar con la corrupción. “Es un discurso ganador para ganar absolutamente”, sostiene Carlos Floriano, que casi se tropieza con las puerta giratorias del hotel al contestar a la pregunta del periodista. María Dolores de Cospedal actúa de Cospe: entra a la sala en diferido.

- Adiós, doña Celia.

No hay duda, se trata de Celia Villalobos. ““Las mayorías absolutas no están garantizadas. Garantizado no hay nada en la vida, sólo la muerte. Hay que trabajar mucho”, zanja la vicepresidenta del Congreso, que en 1995 fichó a un cachorro Moreno como concejal de Juventud del Ayuntamiento de Málaga.

La “falta” de contundencia

El ministro Catalá es de los primeros en abandonar el salón Real rumbo al coche oficial. “Le vamos a ayudar”, avanza. Hay algunos como Francisco de la Torre, alcalde de Málaga, que se queja de la falta de “contundencia” de Moreno en turno de preguntas. “En la primera parte ha estado muy bien”. ¡Qué va a decir! Una alcaldesa de la Costa del Sol está muy contenta del adelanto de las andaluzas. “A mí me va a hacer la campaña. Yo sí sacaré mayoría absoluta, Juanma no lo sé”.

Se ve sola a Esperanza Oña, la Esperanza Aguirre del PP andaluz. “Ahora tengo más tiempo para venir a estas cosas. Yo le he visto bien, lo ha dicho todo muy clarito”. Los corrillos observan de reojo a la exalcaldesa de Fuengirola, el mirlo blanco, ya un tanto azuloscuro –aún no negro– de la oposición interna pepera.

Y Moreno sigue sin aparecer. Le esperan empresarios como su representante andaluz, el presidente de la patronal, Javier González de Lara o el consejero delegado del grupo Sando, Luis Sánchez Manzano. Ya hace un rato que han abandonado el hotel Ritz Cristina Cifuentes y a Ana Botella ni se le ha visto. La entrevistaban en RNE.

Ya son las 11 horas y Nacho Amero ya está al piano en el Krug Bar del Ritz. Toca Moon River y Begin the beguine de Cole Porter. Juanma y Mariano se pierden la interpretación del pianista mexicano. Salen por la puerta de atrás. Es la gripe, será la gripe andaluza de la mayoría absoluta…