Al Qaeda del Magreb apunta a Ceuta y Melilla tras la detención de la célula yihadista

La rama magrebí de Al Qaeda ha señalado a Ceuta y Melilla -a las que denomina "ciudades usurpadas"- en un comunicado motivado por la detención el 21 de junio de ocho presuntos integrantes de una red vinculada con la organización terrorista en Ceuta, los mismos que enviaron a 50 personas a combatir a Siria. Bajo el título de "Ceuta y Melilla: Los tribunales de la Inquisición se erigen de nuevo contra los musulmanes", Al Qaeda del Magreb Islámico (Aqmi) recuerda la "ocupación" de ambas ciudades. La causa de Ceuta y Melilla ha estado presente en varias proclamas de los líderes de Al Qaeda -incluido Aymán al Zawahiri, el que fuera número dos de Bin Laden y hoy posiblemente lleve las riendas de la organización-, pero rara vez le han dedicado un comunicado exclusivamente. 

El texto ha sido distribuido a través del brazo mediático de Aqmi, denominado Al Andalus, y está firmado por quien lo dirige, el jeque Abu Abdul Ilah Ahmad al-Jijeli, una voz habitual en el asentamiento de la doctrina de la organización. El comunicado no ahorra críticas para el ministro de Interior español, Jorge Fernández Díaz, de quien dice que sigue "la lógica del Faraón" por sus declaraciones tras las detenciones: "No estamos hablando de combatientes, de soldados, en el conflicto bélico en Siria, sino de captar yihadistas con la finalidad de cometer atentados", señaló entonces el ministro. Tampoco es parco en apelativos al referirse al rey marroquí, Mohamed VI, "que no se estremece ante la pérdida de las dos ciudades usurpadas, por no decir Al Ándalus". 

Adoctrinamiento y financiación

El comunicado denuncia la colaboración hispano-marroquí en el caso de la red desarticulada en Ceuta, que captó y envió remesas de yihadistas desde la ciudad autónoma y Marruecos a luchar en Siria, incluido algún menor. Se cree que algunos de ellos cometieron atentados suicidas, mientras que otros permanecen en campos de entrenamiento. La red los adoctrinaba y financiaba sus viajes, siempre obedeciendo las órdenes de Al Qaeda. 

"Ha llegado el momento de que los pueblos reprimidos rompan el muro de silencio y desafíen el látigo del verdugo", culmina el comunicado de Al Qaeda del Magreb Islámico (Aqmi), a la que se le atribuyen los atentados de Casablanca de 2007; el secuestro en 2009 de los cooperantes españoles de la ONG Barcelona Acció Solidària Albert Villalta, Roque Pascual y Alicia Gámez, en Mauritania; y el del turista francés Michel Germaneau, en Níger, en 2010.