El PSOE andaluz respalda a Griñán e insiste en presionar a Rubalcaba

Los socialistas andaluces respaldan (por el momento) sin fisuras a José Antonio Griñán. El PSOE-A, más griñanista que nunca, respalda la idea de su presidente: quieren que Alfredo Pérez Rubalcaba decida de una vez si se presentará o no a las elecciones primarias. Las huestes de Griñán amparan la presión del presidente del partido al secretario general, que fue rotundo el día de Navidad: “Debería definirse y debería decir que sí”.

Fuentes de la Ejecutiva del PSOE andaluz destacaron a El Confidencial que Rubalcaba debería aclarar “cuanto antes” su decisión. Y explican las razones: “Si se mantiene mucho tiempo la incertidumbre no será nada bueno para el partido. Ahora mismo hay mucha angustia en la organización. Con un sí se aplacarían los ánimos y se resolverían varias incógnitas que hay sobrevolando. Si empieza un baile de muchos candidatos nos irá mucho peor”.

La secretaria de política institucional del PSOE-A, Verónica Pérez, intentó minimizar las declaraciones de Griñán en las que el presidente de la Junta de Andalucía instó a Rubalcaba a que expusiera su idea sobre su candidatura al proceso de liderazgo interno en el PSOE. “No ha dicho nada del otro mundo: es algo lógico y razonable que disipe la duda" de si se va a presentar o no a las primarias”, subrayó Pérez.

Eso sí, la dirigente socialista, promocionada para la Ejecutiva regional por Susana Díaz, consejera de Presidencia y secretaria general del PSOE de Sevilla, no ha tenido más remedio que admitir una cierta incomprensión de las palabras de Griñán en la entrevista radiofónica. “Quizá no se han entendido bien [sus declaraciones]”. Quien sí tiene muy claro lo que dijo el presidente del PSOE es el eurodiputado asturiano Antonio Masip. En su cuenta de Twitter tildó a Griñán de "patético" y se preguntó: “¿Qué resolvemos mirándonos ombligo y replanteándonos un liderazgo recién electo?”.

José Antonio Griñán sí ha conseguido adhesiones de socialistas relevantes no andaluces. Es el caso del alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, que considera la propuesta de Griñán como un planteamiento "responsable" y "de estabilidad en el partido". En la misma línea se muestra Tomás Gómez, jefe de la oposición socialista en la Asamblea de Madrid: “Hay una confluencia de muchos dirigentes del partido en que tiene que haber cambios, otra cosa es cómo entiende cada uno los cambios. Como los veo, yo se lo dije directamente y en persona en un ámbito interno del partido a Alfredo Pérez Rubalcaba”.

Como ya publicó El Confidencial el pasado mes de octubre, tras conservar el poder institucional en Andalucía, el PSOE de Griñán ha asumido su papel de referencia en el socialismo español con suficiencia y las derrotas de Patxi López y Pachi Vázquez no han hecho sino aumentar su creencia de considerarse indispensable en el PSOE, aunque en Ferraz minimizan su capacidad para convertirse en un sucesor creíble de Alfredo Pérez Rubalcaba.

Griñán, con todo, niega que se vaya a convertir en el relevo de Rubalcaba en la secretaría general. También dijo apenas unos meses antes de asumir la Presidencia de la Junta de Andalucía en abril de 2009 que estaba pensando en su jubilación política. El presidente de la Junta de Andalucía es totalmente imprevisible.