Desbarajuste total en el Gobierno a cuenta de la retirada de las tropas de Kosovo

El Gobierno ha dado un auténtico espectáculo de descoordinación en las últimas horas respecto a la retirada de las tropas españolas de Kosovo. La decisión fue anunciada el jueves por la ministra de Defensa, Carme Chacón, y pilló con el pie cambiado a medio Gobierno, que no tenía ni idea. Durante el fin de semana se han sucedido las rectificaciones y reafirmaciones, hasta el punto de que no se sabe exactamente cuál es la última postura oficial, si es que la hay. Chacón ofrecerá hoy una rueda de prensa en la base de Rota (Cádiz) que ha generado una expectación inusitada tras este desbarajuste.

 

El titular de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, fue pillado en fuera de juego por sus colegas europeos en Bruselas; el embajador en EEUU, Jorge Dezcállar, no sabía nada; Bernardino León, secretario general de la Presidencia, tuvo que contradecir a la ministra en Washington; y, por supuesto, ni el Parlamento ni el jefe de la Oposición habían sido informados. El esperpento se completó ayer por tarde, cuando el Ministerio de Defensa se ratificó inicialmente en que la decisión de replegar las tropas españolas desplegadas en Kosovo es firme y que el grueso volverá a casa antes del verano, pero después rectificó y señaló que se hará de forma "escalonada y flexible".

Después de este espectáculo, la gran duda que se plantea todo el mundo es si esto ha sido una decisión unilateral de Chacón, en cuyo caso le puede costar el puesto por el deterioro de las relaciones con EEUU, o si Zapatero es el autor de la idea o, cuanto menos, la conocía. La mayoría d elos analistas se decanta por esta segunda opción, con los argumentos de que "Chacón no puede tomar una decisión de este calado por su cuenta" o de que "si Zapatero no sabía nada, entonces sí que hay un problema en el Gobierno".

Dentro de esta supuesta rectificación, la ministra se reunirá la próxima semana con el secretario general de la OTAN, Jaap de Hoop, para tratar de aplacar el malestar generado en nuestros socios por esta decisión unilateral e inesperada de retirar el contingente español, formado por unos 630 militares. Según Defensa, el JEMAD está en contacto directo con las autoridades militares de la Alianza para coordinar el repliegue.