La imprevisión de Fomento hace de Madrid un caos

El Ministerio de Fomento no tiene la culpa de la peor nevada que ha afectado a Madrid en diez años. Sí la tiene de que el único mensaje que podía lanzar a las once de la mañana, con cientos o miles de coches atrapados en autopistas nacionales como la A-2, es que “estaban recabando datos”, según se pudo escuchar en un boletín horario radiofónico. ¿Discutible? Lo que no admite discusión es que la nevada pilló al Gobierno con el pie cambiado y que el departamento que dirige Magdalena Álvarez no tiene el don de la oportunidad. Y es que Fomento probablemente eligió el día más conflictivo del año para presentar su ambicioso plan contra los puntos negros. Una especie de broma de mal gusto teniendo en cuenta que todo el centro de Madrid era un punto negro… o blanco, según se mire.

 

Los testimonios de los madrileños que se quedaron atrapados en las autopistas e incluso en el propio aeropuerto de Barajas, que estuvo cerrado durante cinco horas, describen la situación de caos total que vivió ayer la capital española. La vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, no hizo más que tirar balones fueras durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros: “Si hay polémica, que se aparque. Lo prioritario es resolver los problemas de los ciudadanos”. No entró en mayores precisiones.

El consejero de Presidencia de la Comunidad de Madrid, Francisco Granados, acusó a la ministra de Fomento de “absoluta imprevisión y falta de medios”. Y fue más allá. Denunció el cambio radical del parte ofrecido por la Agencia Estatal de Meteorología entre la madrugada del jueves y la mañana del viernes, al tiempo que insistió en que no resulta lógico que una nevada corte carreteras nacionales y uno de los principales aeropuertos de Europa. Álvarez respondió bien avanzada la tarde repartiendo responsabilidades. “Fallo hay de todos”, dijo, apuntado a su propio departamento, a los responsables autonómicos y a la Agencia de Meteorología.

Paradójicamente, el colapso de este 9 de enero coincide con el Plan de Viabilidad Invernal más importante de entre los lanzados por la Administración Zapatero, al menos en cuanto a dotación económica. No en vano, el Gobierno ha destinado para la campaña 2008-2009 un total de 52,6 millones de euros, frente a los 49,7 millones del anterior plan.

A pesar de estas cifras y a tenor de lo sucedido ayer en Madrid, de poco parecen haber servido los 34,71 millones de euros destinados este año sólo a quitanieves, hasta un total de 1.068 disponibles entre los contratados y propios, que los conductores echaron ayer en falta, justo el día que más falta hacía. Según fuentes del Ministerio, 2.000 efectivos y 700 máquinas quitanieves, el cien por cien de los posibles, trabajaron ayer en las diferentes comunidades autónomas afectadas por el temporal.

Aunque las cifras no cuadren, menos todavía cuadra que a Madrid únicamente se destinaran 90 quitanieves, según los propios datos de Fomento. En algún momento del día sufrieron cortes la A-1, la A-2, la A-3 y la A-4. Aunque las carreteras del Estado suponen sólo el 15,6% de toda la red, aglutinan el 52,2% del tráfico total.

Falta de aparcamientos

Asimismo, el último Plan de Viabilidad admite la falta de aparcamientos para situaciones de emergencia y destinados especialmente para vehículos de carga. De hecho, únicamente hay ocho operativos, mientras que 25 se encuentran en ejecución por una cuantía de casi 34 millones de euros y Fomento proyecta licitar “próximamente” otros 20 por 36,9 millones. Resulta irónico recordar que los tres pilares de la campaña son disponer con antelación de la información meteorológica sobre fenómenos adversos, tomar decisiones sobre las restricciones de tráfico e informar a los medios de comunicación y a los usuarios en tiempo real.

En todo caso, De la Vega añadió tras el Consejo que Fomento estaba trabajando de forma coordinada con todas las comunidades autónomas para resolver las complicaciones circulatorias. Fue no obstante el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, quien se dirigió a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, para establecer un dispositivo de coordinación entre todas las instituciones ante el temporal. El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, asistió a mediodía a una reunión en el Ministerio junto al viceconsejero de Presidencia de la Comunidad, Alejandro Halffner.