La bolsa europea ofrece oportunidades en las correcciones y para valores concretos

En los tres últimos meses la renta varible europea ha experimentado un importante rebote. A pesar de que las bolsas de la región pueden experimentar una corrección importante, que según Marc Faber puede ser de hasta el 20%, los expertos siguen considerando que las acciones europeas son una buena opción para las carteras. Una idea con la que coincide el ‘gurú’ estadounidense, aunque advierte sobre las correcciones en los próximos tres meses.

Marc Faber, autor de ‘Gloom, Boom, Doom’ que ganó su reputación al apostar por mercados infravalorados y al predecir el crash de 1987, reconoce que entró en la renta variable europea el pasado junio, cuando marcaron mínimos anuales. El Eurostoxx50, que gana en el año casi un 7%, se ha revalorizado casi un 20% desde principios de junio, el Dax ha sumado más de un 18% en tres meses y el Cac ha subido casi un 17% desde el 31 de mayo.

Llegados a este punto, el experto cree que en los próximos tres meses puede haber importantes caídas, de entre el 10 y el 20%. Cuando esto suceda, es el momento de comprar”. “No digo que vaya a colapsar, pero caerán y cuando lo hagan las añadiré a mi cartera”, afirma. Faber cree que las acciones europeas son una opción de inversión a tener en cuenta. Son un activo mejor que otros, como por ejemplo, los depósitos.

El momento es delicado y hay expertos que creen que dado que, más allá de la crisis de deuda, las cifras ‘macro’ pueden decepcionar, hay que tener cuidado al escoger en qué valores se entra, tal y como señalaba hace un par de semanas Deutsche Bank. En este sentido, Beatriz López, gestora de fondos de EDM, comenta que “el momento actual constituye una excelente oportunidad para construir o incrementar la exposición a Europa. Eso sí, la elevada volatilidad exige también una elevada selectividad en las inversiones”.

EDM, que ha conseguido en su fondo Strategy una ganancia acumulada en el año del 13,7%, señala que las compañías por las que hay que apostar son aquellas con una elevada exposición internacional. O, en el caso de empresas con una parte importante de sus beneficios en Europa, elegir aquellas con características intrínsecas de los segmentos de negocio en los que operan. “Intentamos buscar compañías con beneficios sostenibles y elevada visibilidad, es decir, negocios con la menor ciclicidad”.

La incentidumbre a la que se enfrentan los mercados europeos en los próximos meses ya está, en opinión de López, reflejada en las valoraciones de las empresas europeas de calidad. “Éstas cotizan a niveles muy atractivos, tanto en términos absolutos, como en relación con sus homólogas norteamericanas”, señala.

Desde Inverseguros señalan que “precisamente, ahora más que nunca, la renta variable europea es una opción, no solo porque acumula potencial, sino porque tiene que experimentar una expansión en múltiplos que otros mercados no pueden justificar”.