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Ni Getafe ni Atlético quisieron la victoria y el empate le sale caro a Simeone
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LOS ROJIBLANCOS ACABARON CON NUEVE POR EXPULSIÓN DE MARIO Y GODÍN

Ni Getafe ni Atlético quisieron la victoria y el empate le sale caro a Simeone

La jornada dominical estaba marcada por el derbi madrileño que protagonizaban Getafe y Atlético de Madrid pero el Coliseum Alfonso Pérez volvió a mostrar grandes claros

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Ni Getafe ni Atlético quisieron la victoria y el empate le sale caro a Simeone

La jornada dominical estaba marcada por el derbi madrileño que protagonizaban Getafe y Atlético de Madrid pero el Coliseum Alfonso Pérez volvió a mostrar grandes claros en su graderío. Ni el atractivo del encuentro, ni la hora, ni el buen tiempo del que disfrutaban en el sur de Madrid ayudaron. Los aficionados que no siguieron a sus equipos en directo tampoco se perdieron mucho porque fútbol hubo el justo. Ninguno hizo méritos para firmar la victoria en un partido marcado por el juego subterráneo, el penalti que Delgado Ferreiro transformó en falta y las expulsiones del Atlético que acabó con nueve jugadores. Reparto de puntos y empate sin goles que sale más caro al Atlético que al Getafe.

La lesión de Arda hizo que Simeone diera la responsabilidad ofensiva a Adrián. El delantero asturiano cuenta con la confianza de su entrenador que está empeñado en recuperar la mejor versión de su jugador y ante el Getafe tuvo una nueva oportunidad de demostrar que nunca se ha ido. Y se notó rápidamente. El Atlético de Madrid empezó dominando, siendo incisivo por la banda derecha aprovechando que Alexis era el encargado de ocupar el lugar habitual de Escudero. Adrián dio fluidez a su equipo y un taconazo suyo dio lugar a una contra que armaron Koke y Diego Costa y que Falcao no supo culminar porque puso mal el balón con el interior. Era el primer aviso peligroso de los rojiblancos. Adrián siguió insistiendo y su equipo aprovechó los saques de esquina para intentar poner en apuros a Codina. Su homólogo rojiblanco, Courtois y su defensa  también tuvieron que aparecer en algún momento puntual.

Con el paso de los minutos, el partido se empezó a trabar. Las interrupciones por una u otra razón desterraron el fútbol del Coliseum Alfonso Pérez. Sin Pedro León en el campo (se retiró lesionado), el juego subterráneo empezó a tomar demasiado protagonismo. El partido se cortaba constantemente por las faltas y ninguno de los dos equipos lograba desplegar su juego para que el fútbol recuperase su lugar. Esta dinámica perjudicaba al Atlético de Madrid cuyas líneas empezaron a separarse en exceso, descentrando a un equipo donde el que más incordiaba era Diego Costa. El brasileño hizo de la banda de Alexis su territorio y creaba problemas al Getafe a su antojo. La imagen de los azulones dejaba mucho que desear porque sólo dieron miedo durante un minuto, tiempo en el que encerraron a su rival a balón parado. No hubo más noticias de los chicos de Luis García que regalaron a Courtois unos primeros 45 minutos muy tranquilos.

Sin ganas de jugar al fútbol

Al Atlético de Madrid le faltaba chispa pero al menos daba muestras de querer la pelota a pesar de la buena presión del Getafe. Y cuando ésta bajó, apareció, una vez más, Falcao para cabecear un centro de Koke que acabó en las manos de Codina. El primer tiempo se marchó con el aburrimiento por bandera y poco fútbol pero las cosas intentaron cambiar tras el descanso gracias al empeño que puso el Atlético: Falcao tardó 20 segundos en probar suerte, cinco minutos después fue el turno de Filipe Luis y en medio un error de la zaga rojiblanca propició la ocasión más clara del Getafe por medio de Barrada.

La presión local de la primera parte se desvanecía y la sensación que transmitía el Atlético era que el marcador estaba de su parte porque, quince minutos después de empezar la segunda parte, las ganas de ir a por la victoria disminuían de forma alarmante. El partido volvía a la dinámica del inicio y sólo las apariciones intermitentes de Falcao amenizaban un choque tedioso. Ni el colombiano ni el Atlético están igual de finos que en la primera vuelta. Simeone se dio cuenta que su equipo necesitaba un revulsivo y eligió a Oliver Torres a media hora del final pero el que animó el partido fue Delgado Ferreiro cuando decidió que la acción de Godín sobre Colunga era fuera del área cuando el jugador azulón había caído dentro. Lo que era un penalti se convirtió en una falta en la frontal botada por Barrada que se marchó rozando el poste.

Con nueve

A quince minutos del final, el Atlético de Madrid se quedó con diez jugadores después de que Mario Suárez viese la segunda amarilla. A pesar de su inferioridad numérica, el conjunto rojiblanco se vino arriba y el Getafe volvió a la vida en los últimos compases del partido pero era demasiado tarde para intentar solucionar lo que no habían hecho hasta el momento. Cuando el marcado señalaba lo últimos minutos, Simeone vio cómo Godín condenaba a su equipo a defender los arreones del Getafe con nueve jugadores porque el defensa también se marchaba antes de tiempo por doble amonestación. Ni Getafe ni Atlético quisieron jugar al fútbol y, evidentemente, ninguno hizo méritos para firmar la victoria en el Coliseum.

Ficha técnica

Getafe: Codina; Valera, Fede, Lopo, Alexis; Borja, Xavi Torres (Paco Alcácer, min. 75); Pedro León (Lafita, min. 17), Abdel Barrada, Diego Castro; y Colunga (Álvaro, min. 85).

Atlético de Madrid: Courtouis; Juanfran, Miranda, Godín, Filipe; Mario, Gabi; Diego Costa (Raúl García, min. 77), Koke (Oliver, min. 62), Adrián (Cebolla Rodríguez, min. 74); y Falcao.

Árbitro: Delgado Ferreiro (Comité Vasco). Mostró cartulina amarilla a Alexis (min. 9) y a Valera (min. 87) por parte del Getafe. Expulsó por doble amonestación a Gabi (min. 67 y 74) y Godín (min. 70 y 90), del Atlético.

Incidencias: Partido correspondiente a la trigésima jornada de la Liga BBVA disputado ante cerca de 10.000 espectadores en el Coliseum Alfonso Pérez de Getafe.

La jornada dominical estaba marcada por el derbi madrileño que protagonizaban Getafe y Atlético de Madrid pero el Coliseum Alfonso Pérez volvió a mostrar grandes claros en su graderío. Ni el atractivo del encuentro, ni la hora, ni el buen tiempo del que disfrutaban en el sur de Madrid ayudaron. Los aficionados que no siguieron a sus equipos en directo tampoco se perdieron mucho porque fútbol hubo el justo. Ninguno hizo méritos para firmar la victoria en un partido marcado por el juego subterráneo, el penalti que Delgado Ferreiro transformó en falta y las expulsiones del Atlético que acabó con nueve jugadores. Reparto de puntos y empate sin goles que sale más caro al Atlético que al Getafe.

Diego Simeone