Un harakiri de Fernando Torres haría más daño al Atlético de Madrid

"A ver si les conseguimos ganar porque ya va tocando". Son palabras en primera persona y durante una charla informal de Fernando Torres durante su segunda temporada con el Liverpool. No se refería al Everton, Manchester United, Chelsea o Arsenal… sino al Real Madrid. Su escudo, el que defendía en esos momentos, era uno del norte de Inglaterra pero su cabeza y, sobre todo, el corazón, aún estaban teñidos de rojiblanco. Algo que por muchas camisetas que se ponga, nunca podrá ocultar. Esta noche viste de azul, trabaja para el Chelsea, y se enfrenta al Atlético de Madrid. Si marca un gol no lo festejará: a nadie le gusta celebrar un harakiri. Y, en este caso, mucho menos al conjunto colchonero.

Fernando Torres se reencuentra con su historia, con su equipo de toda la vida, el que le vio crecer, ese, por el que siente realmente los colores. El destino ha querido que el Atleti volviera a cruzarse en el camino del 'Niño', pero esta vez en una final, la de la Supercopa de Europa. El Chelsea quiere ganarla por segunda vez en su historia tras la lograda en 1998, en el equipo colchonero todavía saborean la que le ganaron al Inter de Milán en 2010, volver a ganarla supondría dar un golpe sobre la mesa de un equipo que siempre ha estado marcado por las dudas y los altibajos.

Para Torres, marcar un gol en este partido le dolerá más que nunca, ya que tal y como ha confesado "está ante el partido más especial de su vida". Los años que el canterano rojiblanco pasó en el Atlético han sido la identidad de su fútbol, esa que le ha llevado a conseguir dos Eurocopas y un Mundial como jugador internacional y una Champions con el Chelsea, como títulos más distinguidos en su carrera deportiva.

Del Atlético, se marchó al Liverpool y lo hizo para hacerse un hueco en una de las Ligas más competitivas del mundo, la Premier League. No sólo se hizo un sitio, sino que se convirtió en una de las piezas fundamentales de aquel 'SpanishLiverpool' dirigido por Rafa Benítez. En los 'Reds' estuvo cuatro temporadas y en la 2010/2011 se marchó al Chelsea en el mercado de invierno por casi 59 millones de libras.

Desde su fichaje con el Chelsea le acecharon las dudas, después de que en media temporada sólo lograse marcar un gol en 18 partidos disputados. Torres cerró la pasada campaña con 12 goles en 67 partidos y, aunque siempre estuvo en el punto de mira, frenó las críticas a base de títulos, primero con la Champions lograda con los 'Blues' y después realizando un papel fundamental en la pasada Eurocopa, donde España defendía título.

Ahora Torres vuelve a encontrarse con el pasado y lo hace para intentar añadir otro título a su palmarés. El ariete madrileño ha reconocido en la rueda de prensa que siente nerviosismo ante las sensaciones que vivirá en el partido de esta noche: "Va a ser extraño para mí, porque durante 90 minutos no voy a ser un aficionado rojiblanco, pero lo volveré a ser de nuevo después de que el partido haya terminado", aseguró.

Tanto el Chelsea como el Atlético de Madrid llegan a esta final en un gran estado de forma, con Falcao y Fernando Torres en un gran momento y con equipos plagado de grandes jugadores de la talla de Arda Turan, Lampard o Mata. El Atleti regresa tres años después al Stade Louis II de Mónaco con el grato recuerdo de la victoria ante el Inter de Milán. El pasado es inmejorable, ahora buscan que el presente también lo sea.

Alineaciones probables:

Chelsea: Cech; Ivanovic, Cahill, Luiz, Cole; Lampard, Mikel; Bertrand, Hazard, Mata; Torres.

Atlético de Madrid: Courtois; Juanfran, Miranda, Godín, Filipe; Mario, Gabi; Adrián, Arda Turan, Cristian Rodríguez; y Falcao.

Árbitro: Damir Skomina (Eslovenia).

Estadio: Luis II de Mónaco.

Hora: 20.45.