Javi Martínez abandona el Athletic Club de una manera que él no había deseado

Este viernes se cierra el mercado de fichajes y parece que la última semana va a ser la más movida del verano. El lunes Luka Modric se convertía en jugador del Real Madrid y este miércoles, Javi Martínez hacía lo propio con el Bayern de Múnich. El otro culebrón del estío ha llegado a su fin. El club bávaro asumió los impuestos derivados de la operación y colocó encima de la mesa 40 millones de euros, el precio de la cláusula de rescisión del defensa navarro, y Javi Martínez puso punto y final a su relación con el Athletic de Bilbao de una manera que él no había deseado ya que el club vasco adoptó una actitud de no cooperación que ha interferido y dilatado las negociaciones.

No ha sido un fichaje fácil. En San Mamés la tranquilidad brilla por su ausencia desde que Fernando Llorente anunció que no renovaba con la intención de salir del equipo y desde que Javi Martínez empezó a recibir ofertas de los grandes clubes europeos; a esto hay que añadir las continuas ‘locuras’ de Marcelo Bielsa y los resultados cosechados hasta el momento en Liga (dos derrotas con goleadas). La política del Athletic Club pasa por no negociar, el equipo que quiera a alguno de sus jugadores deberá pagar la cláusula que aparece en el contrato del futbolista deseado. A esta postura hay que añadir que el equipo no se ha mostrado dispuesto a colaborar durante el periodo de negociación ya que ha puesto las cosas difíciles. Incluso llegó a barajar la opción de denunciar al equipo alemán aludiendo al artículo 17 del Estatuto de Transferencia de Jugadores que dicta que ningún club puede contratar a un jugador en período protegido, es decir, a lo largo de las tres temporadas posteriores a la entrada en vigor de un contrato si se firmó antes de que el jugador profesional cumpliese 28 años. El defensa cumple 24 años este domingo y renovó en abril de 2011. Por el momento, esta opción parece descarta pero Karlheinz Rummenigge, presidente del consejo directivo del Bayern confirmaba que “el traspaso ha sido complicado porque en ningún momento ha habido cooperación por parte del Athletic”. El comunicado emitido ayer en el que se informaba que el jugador no tenía permiso para viajar a Alemania fue un ejemplo más.

A Javi Martínez le hubiese gustado salir de Bilbao de otra forma y aunque él mismo confesó que ha sido “una espera larga” está orgulloso y satisfecho de formar parte de un club tan importante y que aspira a todo como es el Bayern de Múnich al que el español definió en la televisión del club como “uno de los mejores equipos de Europa y del mundo. Hay jugadores que hacen un fútbol fantástico y esto es una motivación para mí. Naturalmente, espero ganar títulos”. Y es que ésta es la principal razón que ha motivado a Javi a querer cambiar de equipo. El defensa navarro sabe que está lejos de alcanzar su techo y por ello deseaba defender la camiseta de un equipo en el que su crecimiento futbolístico no tuviera los límites que existen en el Athletic Club. Para ello no ha dudado en renunciar a parte de su salario tal y como informaba Rummenigge que reconocía que 40 millones “es una suma alta” y que las referencias que tenían del jugador llegaron a través de Vicente del Bosque: “Podéis estar contentos con Javi porque nos ayudaría a progresar en nuestro juego”.

Una negociación de meses resuelta en dos días