Mercedes y un "gran amigo" dan otra llave a Merhi para "abrir más puertas"

Está disfrutando. Corriendo y ganando después de pasear por un invierno complicado y algo frío sin el acomodo de un asiento. Roberto Merhi, sorprendente segundo clasificado en las World Series by Renault, bajará este fin de semana un escalón a la F3 Británica en Spa por gusto, “por entrenamiento y, en parte, por Mercedes y por el buen trato” con su “gran amigo” Anthony Hieatt y su Dallara Mercedes del equipo Double R. Para rematar, el premio de pilotar en F3 será obtener ‘licencia’ de cara a disputar el prestigioso GP de Macao, aunque esta prueba “hay que mirarla con calma”, sostiene el joven de 23 años a El Confidencial.

“Hay un parón ahora largo, de un par de meses, y este fin de semana es bueno para tratar de seguir en forma. Para entrenar”. Sin una alta presión de resultados, seguro que este viernes y sábado Merhi saboreará cada una de las tres pruebas que disputará en una categoría que conquistó en 2011 a través de la F3 Euroseries.

"Está desesperado por correr en Macao y siempre he pensado que es una megaestrella. Además, es un piloto respaldado por Mercedes, por lo que cumple todos los requisitos". Pocas palabras más le hacen falta a Hieatt para saber que es un ‘admirador’ de Merhi, quien en 2014 lleva dos victorias y dos segundos puestos, sumando todos los puntos del equipo Zeta Corse (cuarto en la general de equipos) y, quedando por delante en todas las carreras que ha concluido de su compañero Roman Mavlanov, que no ha puntuado todavía. El resultado tras las once primeras carreras en las World Series “ha sido positivo. Comenzamos no muy bien porque hacía tiempo que no cogía monoplazas pero fuimos avanzando hasta llegar al objetivo de ganar carreras recortar puntos con respecto al líder (Carlos Sainz Jr, con cinco victorias)”.

No sólo la ‘maquinaria’ de Merhi ha evolucionado, también su monoplaza. Esta unión ha hecho posible respirar el actual ambiente y las continuas “felicitaciones” por parte de Mercedes. No obstante y pese a esta euforia a mitad del camino, si el GP de Macao lo mira “con calma”, pensar en el futuro de 2015 es algo todavía más lejano. Eso sí, la sonrisa aparece en su rostro al admitir que cada buena actuación que tenga será motivo de “abrir más puertas”, incluyendo la de este fin de semana en Spa y el futurible GP de Macao.