"¡Joder, yo también estoy aquí en medio!", cuando Dani Clos supo que era piloto de F1

Este viernes, su nombre apareció en una tabla de tiempos junto a otros como el de Schumacher, Alonso, Vettel, Raikkonen o Hamilton y, sin embargo, respira con la misma tranquilidad con la que lo hacía antes. Se llama Dani Clos y ayer realizó su debut oficial en la Fórmula 1 participando en los primeros entrenamientos libres del GP de España con HRT. “Sí, ya se puede decir que soy piloto de Fórmula 1 y bla, bla, bla… pero lo estoy asumiendo de forma natural porque es para lo que me he preparado desde siempre”. Lejos de suponer un estatus superior, el piloto catalán ha adoptado con normalidad su nuevo rol sin esconder, en una entrevista mantenida con El Confidencial, que “ha sido un día muy importante”.

Otro piloto español más que se estrena en el Gran Circo, el último en hacerlo fue Jaime Alguersuari. El primer paso -el debut en unos entrenamientos- está dado y, a corto plazo, lo siguiente sería competir cada domingo… aunque eso prefiere ni oírlo. “A final de temporada me veo donde estoy, que es para lo que me han contratado. Mi siguiente objetivo es continuar el trabajo que veníamos haciendo hasta ahora y cada vez que me suba en el coche hacerlo mejor y aportar la información adecuada al equipo”. Mantiene la cabeza fría y sin dibujar castillos en el aire. La ambición y la profesión van por dentro.

Afición por quemar rueda

Nació en Barcelona hace 23 años y medio. Dejando de lado que es un piloto de F1, Dani es “una persona normal y corriente, muy deportista y al que le gusta estar con los amigos y, a veces, hacer alguna barbaridad. Como todo el mundo”. Una afición que practica y donde encaja el concepto de “barbaridad” puede ser el drifting, una modalidad automovilística “totalmente opuesta a lo que me dedico. Es ir completamente de lado y sacando mucho humo, lo que a Pirelli no le gusta”.

Desde este año, su melena rubia platina hace competencia a la de Nico Rosberg en las reuniones que mantienen los pilotos antes de cada gran premio. Aquí es donde Dani Clos dejó el traje de la normalidad colgado para darse cuenta del sitio tan especial y selecto donde trabaja. En los cuatro meses de ‘vida’ en la Fórmula 1, lo que más le “ha impresionado ha sido el briefing (sesión informativa), cuando estamos todos juntos. Al  llegar al briefing y ves a todos los campeones y los grandes pilotos dices… ¡joder, yo también estoy aquí en medio!”. A uno de sus pilotos favoritos, Fernando Alonso, ya no le ve por la televisión, trabaja junto a él.

La ‘esponja’ de Pedro de la Rosa

Además del castellano y el catalán, domina el inglés y el italiano y se defiende mejor que bien en francés y portugués. Un abanico lingüístico que uno no puede ampliar cuando tiene como compañero a un compatriota, aunque sepa ‘chino’ en esto de la Fórmula 1. “De Pedro de la Rosa estoy aprendiendo rapidísimo, es muy comunicativo y estoy siendo una esponja. Y no sólo de él, hay muchos integrantes del equipo, como Luis Pérez Sala, de los que estoy obteniendo mucha información y me está ayudando a crecer como piloto”.

Antes de  aterrizar en la Fórmula 1, Dani Clos disputaba la GP2 y, en este salto, en lo personal, lo único que ha notado es una diferencia “mediática”. Por lo demás, sigue siendo el mismo: una persona que sueña con asentarse en el Gran Circo y que disfruta cada instante del momento que vive, algo que se puede apreciar cuando agarra el micrófono de Antena 3 y narra en el pit lane las evoluciones de sus compañeros de trabajo.