El optimismo inunda la candidatura de Madrid tras la puesta en escena

Tres horas para reflexionar, para tomar una decisión que puede marcar el futuro de una ciudad y un país. En estos momentos los miembros del COI, y tras buena cuenta de una comida, están en el proceso definitivo, el de definir su apoyo a cualquiera de las tres propuestas. Los 98 ejecutivos del COI con derecho a voto todavía pueden variar su decisión. No tienen contacto con nadie de las otras candidaturas, salvo con los miembros de la asamblea del movimiento olímpico. Y aquí Madrid tiene la delantera con la presencia de Juan Antonio Samaranch, Marisol Casado y Patxi Perurena. Nadie tiene accesos los votantes.

Durante los últimos meses han sido los primeros en acompañar y pelear el voto de la mano de Alejandro Blanco, pero es ahora, en el momento de la decisión, cuando pueden obtener un voto más o menos que pueda dar a Madrid la organización de los Juegos. Incluso será la del segundo voto, de ese inexplicable cambio de decisión que se produce cuando un candidato se queda en la carrera. Sus votos, en caso de que ningún candidato llegue a los 50 votos necesarios, serán imprescindibles en esta carrera iniciada hace año y medio y que o culmina hasta dentro de otros siete años.

El optimismo seguía persiguiendo a la candidatura madrileña un vez que terminó la puesta en escena. Muchos de los que aparecieron por el salón del hotel Hilton seguían convencidos del éxito, apoyados en la contundencia del mensaje del Príncipe y en la llegada que ha tenido Gasol, al que el propio Jacques Rogge, presidente del COI, le augura un futuro brillante como político o, cuando menos, como orador.