La encrucijada de Tito: la defensa ante el Bayern, un quebradero de cabeza

Llega la fecha marcada a fuego en el calendario azulgrana este martes en Múnich (20:45 h., LA1). Decidida la Liga, a la espera de elegir fecha para cantar el alirón, se empeñan desde el Camp Nou en darle valor al campeonato liguero, ensombrecida su inmaculable trayectoria en Liga con las derrotas en Copa ante el Madrid y las actuaciones algo grises en Europa. “Era un partido muy importante. Ahora parece que la Liga no vale nada, pero es la competición a la que dedicamos más tiempo, aunque la Champions parece que hace más ilusión a la gente. Queremos ganar la Liga y por tanto aspiramos a sentenciarla cuanto antes desde la seriedad”, declaraba Cesc tras conseguir una sufrida victoria ante el Levante. Una victoria que dejó latente lo residual del campeonato doméstico. Donde se juega el prestigio es en Europa.

En ese banco de pruebas en que se ha convertido la Liga para los dos colosos del fútbol español, Vilanova probó ante el Levante  con una defensa desnaturalizada por lo inédito de sus componentes. Adriano y Abidal formaron en el eje de la zaga, con Alves y Montoya en los laterales. Una retaguardia formada íntegramente con cuatro laterales puros, lo que prueba las dificultades que está encontrando el cuerpo técnico para formar una defensa de garantías. Ausentes Puyol y Mascherano para el primer envite ante el Bayern, barruntan en la Ciudad Condal sobre el compañero de Piqué. Y esa terna de aspirantes vuelve a aparecer Eric Abidal.

El francés completó los noventa minutos a un buen nivel, cortando las pocas acometidas que le exigió el Levante, muy encogido durante todo el encuentro. "Es un día que todos estamos especialmente contentos más allá de la valoración deportiva. Es un día muy feliz para él. Ha completado un partido entero y se ha encontrado bien. Futbolísticamente ha estado muy bien, en el uno contra uno, en los cortes, en todos los aspectos", declaraba Jordi Roura en sala de prensa sobre la actuación del francés. Abidal volvía a un once inicial 14 meses después de su última aparición.  Fue ante el Atlético de Madridel 26 de febrero de 2012 (1-2) en el Calderón. Obviamente a nadie se le escapa que su caso es excepcional. Nos ha demostrado que puede ser una alternativa más y la valoraremos en los próximos días. Bartra está físicamente hecho un toro. Es una opción más para valorar de cara al Bayern. En los próximos días decidiremos", contestaba Roura a la posibilidad de que el querido ‘22’ sea de la partida ante los muniqueses.

El otro gran aspirante a acompañar a Gerard Piqué  en el centro de la defensa es Marc Bartra, ninguneado hasta la fecha de tal forma que debutaba como titular en Liga hace unas semanas en Vigo. El canterano, señalado en muchos círculos como el sucesor natural de Puyol, ha entrado en las últimas semanas de forma más continuada. En París, tras la lesión de Mascherano, fue el relevo del argentino. Hace dos años, el central tuvo una oferta del Tottenham de dos millones de euros, sensiblemente superior a lo que cobra en el Barcelona. “Es eléctrico”, afirman en el cuerpo técnico del Barcelona, en el que también afirman que su atrevimiento y riesgo táctico en un equipo tan volcánico en ataque le ha podido pasar factura a la hora de contar con más minutos.

Ante el juego intenso y vertical de los bávaros deberá el Barcelona cuidar mucho las coberturas y el orden táctico, piedra capital sobre la que se edifica el estilo azulgrana. La mayor verticalidad mostrada en el presente curso, alejada del exceso de retórica mostrado en algunas fases de la pasada campaña, ha elevado la vulnerabilidad atrás. Necesita rapidez Vilanova en la zaga. Asegurada la salida limpia del esférico con Piqué, el Barcelona necesita especialmente fiabilidad al corte. El martes se dilucidará el enigma de la defensa azulgrana.