¿Marihuana? Anna Tarrés podría haber tapado un positivo de una de sus chicas

Primero fue su destitución y ahora a Anna Tarrés se le acusa de tapar posibles positivos. Paola Tirados y Cristina Violán, que abandonaron el equipo de natación sincronizada en 2009, dejaron entrever a través de sus acusaciones que la seleccionadora podría haber protegido a algunas nadadoras al tratar de cubrirlas por supuestos positivos. El caso concreto se remonta a enero de 2007, tres meses antes de que se disputase el Mundial de Melbourne, donde España lograría seis medallas (4 platas y 2 bronces). Tarrés apartaría del equipo a una de las integrantes del equipo por haber dado positivo por cannabis y sería después del mundial cuando la nadadora se volvería a incorporar a la disciplina de la seleccionadora, tal y como informaba el diario As. Todos los focos se centran en Raquel Corral, única componente del equipo que no viajó a la cita australiana por una supuesta lesión.

Anna Tarrés llevaba en el cargo de seleccionadora 15 años en los que la natación sincronizada española había estado plagada de éxitos. Pese a ello la Federación Española de Natación decidió prescindir de sus servicios y no renovar el contrato de Tarrés, que finalizaba el 31 de diciembre, “por motivos profesionales y política deportiva”, aseguraban.

Paola Tirados ha sido una de las nadadoras que más órdagos ha lanzado contra su exentrenadora: “Alcanzamos éxitos deportivos pero no en las mejores condiciones humanas de trabajo. Lo pasé muy mal, muy mal. Es un gran acierto de la Federación, creo que llega un poco tarde pero llega”, aseguraba. Por su parte, Cristina Violán se mostraba feliz tras la destitución de Tarrés: "Muchas ex nadadoras que hemos pasado por ahí sabemos que sus formas no son las correctas. Era muy manipuladora y sabía manejar muy bien a las niñas como le interesaba, por eso muchas de nosotras lo hemos dejado. Me parece una decisión súper acertada. Ahora las nadadoras de las selección tendrán la oportunidad de empezar a disfrutar de este deporte", ha afirmado.

Tanto Tirados como Violán han sido dos de las nadadoras que se han mostrado más críticas con Tarrés. Otras de sus acusaciones iban encaminadas hacia la extorsión económica. Al parecer, la seleccionadora repartía las becas en función de los méritos deportivos que había logrado cada integrante, así lo había pactado con las nadadoras. La propia Tarrés se encargó de aclarar lo que había ocurrido en declaraciones a La Sexta: “Esta manera de operar está aprobada por el Comité Olímpico y por las propias chicas", aseguraba la ya exseleccionadora.

Otra de las integrantes del equipo, Andrea Fuentes han preferido mantenerse al margen de toda polémica: "Hablaré cuando vuelva. Lamento el silencio, pero ahora no puedo hablar. Es un momento difícil. Gracias por la comprensión a todos", manifestó la nadadora, que se encuentra de vacaciones”. Por su parte Gemma Mengual, todavía no se ha pronunciado sobre lo sucedido y ha sido una de las pocas que no ha llamado a la seleccionadora.

La acusación por tapar los positivos es un eslabón más de la cadena que se ha desatado tras la destitución de Tarrés como seleccionadora. De momento, todo se queda en un cruce de declaraciones por ambas partes.