Contador 'dispara' a la UCI: son siete grandes

Brazos en alto, disparos al aire, la bandera catalana y el himno español de fondo. Hasta ahí casi todo normal. Contador ya era, oficialmente, el nuevo ganador de la Vuelta a España. Habían sido largos meses de espera, de un sufrimiento que esta victoria ha logrado suavizar pero que no borra los malos momentos vividos. Esos que le han llevado a que se hablará más del 'chuletón' de Irún que de todas las gestas logradas y que le catapultaron al estrellato. 

Por todo ello, el ciclista de Pinto mando un mensaje a la UCI nada más cruzar la línea de meta. Siete dedos en alto. Un siete que simboliza las vueltas que ganó en la carretera - la UCI le desposeyó de dos por dopaje - y que sus rivales, los cuales salieron beneficiados de su sanción, le otorgan. “No me siento ganador del Tour. No quiero el maillot amarillo. Me consideraré vencedor del Tour de Francia si lo ganó en 2012”, así se expresaba Andy Schleck cuando se confirmó la sanción a Alberto, allá por el mes de Febrero de este 2012.

Por su parte Scarponi, al conocerse la sanción de Contador, afirmó que para él nada había cambiado: “Para mí no cambia el valor de los resultados” para luego añadir que “desde un punto de vista humano lo siento por Alberto”. Además dedicó elogios a su rival cuando le era entregado el trofeo y la maglia rosa de esa edición. “Asisto a esta ceremonia como una recompensa por el gran Giro disputado detrás de un Contador todavía más grande. Ahora lo que quiero es ganar el Giro en la carretera”.

Y es que si en algo coinciden la gran mayoría de ciclistas es que las carreras se ganan en la carretera y no en los despachos. Muchos han sido los que han criticado la intención de la USADA de desposeer a Armstrong de todas sus victorias. Amén de que todos coinciden en que el momento más bello que puede vivir un ciclista es cuando sube a lo más alto del podio de una gran vuelta. Ya sea los Campos Elíseos, la plaza Duomo de Milán o la Puerta de Alcalá. Ese momento, la felicidad total, ser el centro de todas las miradas, de todas las portadas, nada de eso viene cuando uno gana tres meses después por descalificación. Si, aparecerás como campeón en los libros de historia, pero no habrás disfrutado del verdadero éxtasis de la victoria.

Lo cierto es que con este gesto de Contador se reabre un debate que cuenta con argumentos validos para los dos partes. Lo único seguro es que el de Pinto dio positivo en el Tour. Que la cantidad encontrada le sirviera para mejorar su rendimiento es algo discutible. Pero siguiendo la reglamentación UCI lo normal es que fuera desposeído de aquella victoria. Más dudoso es lo del Giro, ya que en esa cita Contador no dio positivo y venció con todo merecimiento tras ser infinitamente superior a todos sus rivales. Probablemente se cometiera una injusticia, culpa de la lentitud de los comités sancionadores que tardaron año y medio entre que se detectó el positivo hasta imponerle la sanción.

Un palmarés a la altura de las grandes leyendas del ciclismo

Lo que es innegable es que el pinteño ostenta un récord de triunfos que para sí quisieran el 99% de ciclistas activos y retirados. Alberto Contador inauguró su palmarés en una gran vuelta por etapas con el Tour de Francia de 2007. Fue en una edición salpicada por el dopaje. El positivo de Patrick Sinkewitz provocaba que la televisión pública alemana (RTL) dejara de emitir la carrera. Vinoukourov, ganador de dos etapas, también daba positivo y abandonaba el Tour junto al equipo Astana. Lo propio hacia Cofidis con Cristian Moreni. Iban Mayo también caía por dopaje en esta edición.

El líder a falta de cuatro etapas y con más de tres minutos sobre Contador, Michael Rasmussen, era expulsado de la ronda gala por su equipo Rabobank al no haber sido posible localizarlo durante sus entrenamientos en el mes de junio, lo cual vulnera la reglamentación vigente antidopaje. Su retirada dejaba vía libre para que Contador se llevara el Tour por un escaso margen de 23 segundos sobre Cadel Evans y 31 sobre su compañero de equipo Levi Leipheimer. Era el principio de su leyenda.                                                  

Su segunda grande fue el Giro de Italia de 2008 donde llegó a la última crono con solo 4 segundos de ventaja respecto a Ricardo Riccò, al que le acabo sacando dos minutos. De esta forma se convertía en el segundo español en lograr un Giro, después de que lo lograse Miguel Indurain. Ante la exclusión de su equipo Astana del Tour de Francia, el ciclista español disputaba Giro y Vuelta esa temporada y se adjudicaba ambas. En la cita española se imponía de nuevo a su compañero de equipo Leipheimer gracias a las polémicas bonificaciones ya que sin ellas hubieran empatado a tiempo con el americano.

En 2009 lograba su segundo Tour de Francia. Fue la mayor demostración de poderío por parte de Contador ya que aventajo en más de cuatro minutos a Andy Schleck y en más de cinco a Lance Armstrong. Su superioridad fue aplastante en todo momento y las diferencias podían haber sido aún mayores de no tener al americano como compañero de equipo.

Positivo y dos grandes que ‘vuelan’ de su currículo 

El año siguiente también se coronaría en Paris como ganador del Tour pero dos meses después la UCI filtraba que Contador había dado positivo. Fue el comienzo de una lucha feroz por justificar que el clembuterol descubierto en su cuerpo no era sinónimo de dopaje. Una lucha que se prolongó año y medio durante el cual el corredor siguió compitiendo y venciendo.

El seis de febrero se hacía efectiva la sanción que le suspendía por dos años. Al hacerse efectiva a partir del momento en que se hizo el análisis en el que dio positivo, Alberto perdía entre otros premios el Giro de Italia 2011. Hoy dia, el pinteño sigue defendiendo su inocencia con gestos como el de este domingo.

La victoria de la ambición y la táctica

Contador ha ganado sin ser el mejor. No es una crítica sino un elogio. Ha sido capaz de ganar la Vuelta pese a que ‘Purito’ demostró ser superior a él e incluso Valverde acabó en mejor forma que el ciclista de Pinto. Solo un cambio de estrategia, lanzando a compañeros de equipo por delante para que luego le sirvieran de puente en su ataque lejano, le permitió coger desprevenido al ciclista catalán que luego se encontró sin compañeros y acabo derrumbado anímicamente al ver como la ventaja del corredor de Saxo-Bank crecía y sus opciones de ganar una carrera de tres semanas se desvanecían. 

Alberto vuelve a la primera plana de la actualidad deportiva. Tras mucho sufrimiento, ahora ya toca olvidar el pasado y los problemas y hablar única y exclusivamente de sus éxitos deportivos. Esos que le han llevado a ser comparado con el más grande de todos los tiempos: Eddie Merckx. Muchos ya ansían verle en el próximo Tour de Francia donde se las verá con Bradley Wiggins, Andy Schleck, Vincenzo Nibal, un Chris Froome en plena forma y quizá con los dos españoles que este domingo le acompañaban en el podio. Sí, definitivamente el ciclismo, de la mano de Contador, ha vuelto más fuerte que nunca.