Los cuarenta grados de la Copa Davis y las cuarenta copas de la fiesta Missoni

Pocos rostros conocidos en el coso taurino de Puerto Banus para recibir a los equipos de Copa Davis de España y Alemania que buscan un puesto en las semifinales. Ninguna cara que diera color a las cámaras de los fotógrafos. Unos y otros andaban perdidos por los palcos con la esperanza de conseguir la instantánea de algún “figura de la farándula”. A la entrada pudimos ver a Otti, la ex mujer de Manolo Santana, que asistió al coso para animar al equipo español y se sentó sin más. Sin querer dar que hablar a nadie.

 

En el palco de honor, siguiendo el partido en directo, el presidente de la Federación Internacional de Tenis, el italiano Francesco Ricci Bitti, el secretario de Estado para el Deporte, Jaime Lissavetzky, el consejero de Turismo, Comercio y Deporte de la Junta de Andalucía, Luciano Alonso, y la alcaldesa de Marbella Ángeles Muñoz. La primera edil dijo a El Confidencial que estaba muy satisfecha de la acogida que la Copa Davis había tenido entre el público y nos anunció que mañana estará sentado en el palco de honor Mariano Rajoy, que llegaba en AVE el viernes por la tarde.

El equipo teutón, por su parte, quiere poner más glamour a sus palcos y dice que el domingo estará la  modelo Claudia Schiffer apoyando a sus jugadores. Así que los españoles tendremos a Rajoy y los alemanes a la Schiffer. En fin.

Las caras conocidas empezaron a verse en Marbella a última hora de la noche en la Hacienda Alcuz, propiedad de Jaime Parladé, uno de los grandes decoradores de este país, que celebró la fiesta de Missoni, donde Angela Missoni y su hija Margaretta invitaron a personajes como Ira de Fustember, algunos miembros de los Hohenloe, Beatriz de Orleans o Ana Rosa Quintana y su esposo. Copas y viandas vip que no pudieron ser ‘inmortalizadas’ por los fotógrafos, que no tenían permiso para tomar imágenes. La organización prometió una instantánea vía mail para consolarles.

  

El calor del público, superior al de los termómetros

En el terreno deportivo, Verdasco se impuso a Beck, que debutaba en Copa Davis, en tres horas y 10 minutos, en una jornada de intenso calor en los que los termómetros superaron los 40 grados. La temperatura pasaba inadvertida para el jugador español porque el calor del público que le arropó era  superior al de los termómetros.

Los espectadores del evento deportivo se acercaron desde primera hora de la mañana a los aledaños de la plaza de toros de Puerto Banús para evitar los temibles atascos que tuvieron lugar desde el hotel Puente Romano a las pistas de tenis. Retenciones de tres cuartos de hora en la que los extranjeros que pasan sus vacaciones en la ciudad costasoleña se bajaban de sus vehículos en plena carretera para poder respirar.

Pero la fiesta estaba asegurada. Andalucía es así, el buen humor de sus gentes y a la alegría de vivir que tienen llenaron de colorido las calles ondeando banderas y camisetas rojo y gualda. Pancartas de todos los puntos de la geografía nacional portadas por niños, mujeres y jóvenes, que con sus tambores e instrumentos musicales acompañaba al himno nacional español, se veían por todas las gradas.

A ninguno le faltaba su sombrero de paja para quitar el sol de la cabeza, y un abanico grande para dar algo de aire. A los habituales gritos de 'Que viva España' o los aplaudidores, se le han sumado en esta ocasión carracas y pitos con los que animar a los jugadores de la 'Armada' y de paso aburrir a los contrarios.