La FIA declara legales los difusores y los grandes piden explicaciones

La Corte de Apelación de la FIA ha declarado legales los polémicos difusores que están utilizando Brawn GP, Toyota y Williams desde el inicio del campeonato de Fórmula 1 de este año. Los expertos, reunidos desde este martes en la sede de la FIA en París, han desestimado la reclamación formal presentada por otros cuatro equipos (Ferrari, Renault, RedBull y BMW-Sauber) que entendían que esos difusores aprovechaban un vacío legal y que no respetaban el espíritu de la norma. Por ello, Ferrari espera conocer los motivos de la 'legalidad'. Además, gracias a esta pieza, clave en la aerodinámica de un monoplaza, los tres equipos en cuestión han dominado las dos primeras carreras de la temporada, donde los dos coches de Brawn GP se han mostrado intratables. 

En su comunicado, la FIA indica que "ha decidido rechazar las apelaciones" basándose en los "argumentos escuchados y evidenciados" que prueban que "los coches en cuestión cumplen con la regulación aplicable". Ahora, el resto de la parrilla irá modificando sus monoplazas para insertar este difusor de doble plano que ha demostrado su gran eficacia, por encima  de la del difusor clásico.

Varias escuderías, Renault entre ellas, tenían ya listo su 'plan B' en caso de que la FIA declarara finalmente legal la polémica pieza. Así, en el próximo Gran Premio de China que se disputará este fin de semana, habrá algún equipo que ya hará las modificaciones necesarias para insertar el nuevo difusor. Pero el equipo de Fernando Alonso no será de momento uno de ellos, tal y como adelantaba este miércoles El Confidencial (ver noticia), y Ferrari se prevé que lo tendrá listo para el GP de Singapur. Pero McLaren, la escudería con mayor capacidad de desarrollo tecnológico, sí se espera que monte el nuevo difusor en la carrera de Shangái de este domingo.

Ferrari espera conocer los motivos de la 'legalidad'

La escudería Ferrari de Fórmula 1 permanece a la espera de "conocer los motivos" que han llevado a las autoridades de este deporte a rechazar su apelación contra los difusores empleados por otros equipos. "La Escudería Ferrari Marlboro toma nota de la decisión, que rechaza la apelación presentada por esta escudería e ING Renault F1 Team, Red Bull Racing y BMW Sauber F1 Team, en referencia al cumplimiento del reglamento técnico por parte de tres monoplazas", asegura la nota. El equipo asegura que la decisión del tribunal lo fuerza a intervenir sobre "elementos fundamentales" de su proyecto para poder luchar con ciertos equipos en igualdad, una empresa que necesitará de "tiempo y dinero".

No obstante, Ferrari asegura que multiplicará sus esfuerzos para volver al máximo nivel de la competición. El jefe de operaciones de pista de Ferrari, Luca Baldisserri, se quedará en la factoría durante el Gran Premio de China trabajando en la mejora del coche a la vista del mal comienzo de temporada de la escudería italiana, que no ha conseguido un solo punto en las dos primeras carreras. Se trata del peor comienzo de Ferrari desde 1992, circunstancia que ha suscitado alarma en el equipo.

Brawn, satisfecho: "Ahora el desafío sigue en la pista"

Por su parte, el británico Ross Brawn, propietario de la escudería que lleva su apellido y principal responsable de la polémica pieza, ha declarado su satisfacción por la autorización de los difusores por parte del Tribunal de Apelación de la FIA, ha expresado su respeto hacia los equipos que presentaron su recurso y apunta a que "ahora el desafío sigue en la pista".

"Nos complace la decisión adoptada por el Tribunal de Apelación y respetamos el derecho de nuestros competidores a contrastar cualquier diseño o concepto utilizado en nuestros coches a través de los cauces disponibles", afirma Brawn en un comunicado.

Brawn subraya que los difusores cuentan ahora con el visto bueno del departamento técnico de la FIA, de los comisarios de Australia y Malasia, y ahora de los cinco jueces del Tribunal de Apelación de la FIA. "Esta decisión pone fin a esta cuestión y ahora esperamos continuar el las pistas los desafíos que plantea este excitante comienzo del Mundial 2009", concluye Ross Brawn.