Una investigación coloca a Aznar entre Cameron y el imperio Murdoch

José María Aznar es uno de los 17 consejeros de News Corporation, donde comparte asiento y estatus con históricos como Chase Carey -presidente del holding y presumible sucesor de Rupert Murdoch en el mando ejecutivo- o los hijos del magnate, Lachlan y James. Fue el propio Rupert Murdoch quien le ofreció un lugar en la cúpula de su imperio mediático en 2006, ampliándolo de 13 a 14 asientos para poder acomodar al ex presidente español. A propósito de su incorporación, el entonces septuagenario Murdoch dijo de él que "su impresionante comprensión de la política mundial y las realidades de la globalización, además de sus claro compromiso con la rectitud fiscal, serán de un gran beneficio para los accionistas de News Corporation".

De Murdoch y Aznar se ha comentado que les une una gran relación personal -el australiano ya sería uno de los invitados a la boda de su hija en El Escorial en 2002- que no hace sino consolidarse con los años y extenderse al resto de notables del imperio mediático. Aznar, el primer no anglosajón en la ejecutiva de News Corp y sin duda el de perfil más político, fue reelegido consejero del holding en 2011, cosechando un impresionante 89% de votos a favor entre los accionistas. 

Fue el cuarto consejero con más apoyo –por delante de él se situaron solo James W. Breyer, creador del fondo deinversiones homónimo, Joel I. Klein, antiguo integrante de la Administración Clinton, y el plenipotenciario Chase Carey– y superó en votos tanto a Rupert Murdoch como a sus dos hijos, castigados por el estallido del escándalo del tabloide británico News of the World. La elección, además de contundente, fue un gesto de confianza en el presidente honorífico del Partido Popular: días antes de la Junta en la que saldría ratificado, la firma  Institutional Shareholder Services había aconsejado a los inversores que no renovaran a 13 de sus 15 consejeros, entre ellos el ex mandatario español. Como consejero del grupo, Aznar tiene derecho a una compensación en efectivo y acciones que rondaba los 170.000 dólares anuales en 2006 y ascendió, en el año 2010, a los 220.000.