¿Loco o genio? Un hombre gasta una broma a los asistentes a su funeral

Hace tres años, Shay Bradley recibió una noticia inesperada: sufría cáncer. A pesar de ello, este escocés -veterano de la Fuerza Aérea de su país- tenía claro que su lucha siempre iba a ir acompañada de una sonrisa, esa que nunca le había faltado. Y siguió esta máxima hasta su último día: literalmente. De hecho, su última broma fue, ni más ni menos, que en su propio entierro.

El pasado 8 de octubre, Bradley recibía sepultura tras perder la vida. Pero lo que nadie esperaba es que su sentido del humor saliera a relucir en un día tan triste para familiares y amigos. Ya en el ataúd, su hija Andrea anunció que su padre le pidió que pusieran el himno escocés como despedida... pero 'escondía' algo. Desde hacía más de un año, su hija sabía qué era.

Comenzó a sonar el himno y, cuando terminó, de repente, comenzó a sonar la voz de Bradley. "¿Dónde diablos estoy? Dejadme salir. Esto está oscureciendo". A continuación, sonaron golpes como si estuviera tratando de salir del ataúd para, después, seguir hablado: "¿Lo que estoy oyendo es la voz de un cura? ¡Hola! ¡Hola! Dejadme salir, hombre", decía a gritos.

Los presentes comenzaron a reír, después de encontrarse con una situación que para nada esperaban. En uno de los días más tristes para los presentes, el hombre recién fallecido quiso mandarles un recuerdo a modo de audio. Esta grabación fue realizada casi un año antes, con su hija Andrea como cómplice, ante lo que los familiares comenzaron a reír al recordar su increíble sentido del humor.

Su propia hija es la que explicó en Twitter el porqué de esta broma: "El deseo de mi padre es que reprodujéramos este audio en su funeral. Lo único que quería era hacernos reír cuando estuviéramos realmente tristes", explica. Un genialidad o una locura, dependiendo de cómo se mire, en el entierro más extraño que se ha podido ver en los últimos años.