El impactante final de 'La verdad', explicado por su creador: así murió Paula García

Toda la verdad ha salido por fin a la luz. La verdadera identidad de la falsa Paula, el trágico final de la auténtica hija de los McMahún, la muerte de Fernando, el sacrificio de Marcos,... 'La verdad' ha llegado a su desenlace en Telecinco, y lo ha hecho con una última secuencia de infarto que uno de sus creadores, César Benítez, explica en exclusiva para EL CONFI TV.

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La clave de todo era conocer qué había sucedido realmente aquella fatídica noche en la que muere la verdadera Paula García: "Todo sucedió una noche en que Lidia venía drogada de una fiesta. Fernando y ella tuvieron una gran discusión y Lidia le dice que se quiere separar porque está enamorada de otro, de Lalo. Esa noche Lidia se toma una raya de coca antes de acostarse, droga que Paula confunde con azúcar y se la toma, entrando entonces en convulsiones. Fernando es quien la encuentra agonizando. Se la lleva corriendo al hospital pero, de camino, piensa en el escándalo que supondría que la gente descubriese lo sucedido, por lo que, creyendo además que Paula es hija de Lalo, decide tirarla por un acantilado".

"Es un final muy duro, porque Fernando se deshace de la niña por un ataque de cuernos y porque antepone lo material a la vida de la pequeña"

"Es un final duro, hasta el punto de que el propio Ginés Garcia Millán me pidió si podíamos cambiar el final, porque es una secuencia con la que no se sentía cómodo trabajando", revela su creador, y es que "es un desenlace muy duro, porque Fernando se deshace de la niña por un ataque de cuernos y está convencido de que la hija es de Lalo; y segundo porque antepone lo material, lo que podría perder si se conoce lo sucedido, a la vida de una niña. Esto hace que, en un momento de ira, tire a la niña por un acantilado. Su gran drama será descubrir que finalmente Paula era su hija verdadera y no de Lalo, en una última escena que le rompe por completo pese a la maldad del personaje".

Es por esto que "Fernando tenía que pagar por todo lo que ha hecho, y nos parecía que morir en el mismo acantilado tenía mucho de poético, sobre todo a manos de la falsa Paula", prosigue explicando su creador. "El que a hierro mata, a hierro muere. Pero su desenlace es el más tremendo porque es cuando descubre que verdaderamente mató a su propia hija".

El sacrificio de Marcos

Si Fernando termina recibiendo su merecido, Marcos es el gran sacrificado del desenlace: "Se inmola. Él sabe exactamente quien es cada uno pero decide irse de la policía, llevándose con él el gran secreto: que Paula no es realmente Paula, la nieta de McMahún. Él se quita del medio porque sabe que no tiene sentido tener una relación con la falsa Paula y mantener el engaño y termina dejando lo que más quería, que es su vocación como policía".

Una decisión creativa que no ha contentado mucho a los seguidores de 'La verdad', pero que su creador justifica: "Él es el gran perdedor de esta historia, pero lo hace para que los demás ganen. A Marcos lo motiva el amor más generoso, salvar a esta cría que ha tenido una infancia terrible al haber sido vendida de joven. Ahora va a tener una familia que la acoja y la quiera, y él sería un incordio para todos, por lo que decide marcharse".

"Nunca pensamos en matar a Marcos en este sacrificio final"

Pese a ser el gran perdedor de este desenlace, desde sus responsables aseguran que "nunca pensamos en matar a Marcos en este sacrificio, porque nos parecía mucho más heroico y poético renunciar a lo que más quiere a cambio de nada, solo de la felicidad de otros".

"Siempre tuvimos claro este desenlace"

Pese a la dureza del desenlace, César Benítez afirma que siempre tuvieron claro el final: "Siempre tuvimos claro que este sería el desenlace. El ejercicio de esta serie era arrancar con una gran mentira para ver cómo los protagonistas conseguían que poco a poco se convirtiese en una realidad de cara a la sociedad en la que viven. Para conseguir esto hay muchos sacrificios, como el de Marcos o el de Lalo, que renuncia a dar un bombazo periodístico para salvar a la persona a la que quiere".

"Al menos él sí tiene un final más o menos satisfactorio al acabar con el amor de su vida, con Lidia, quien por fin ha tomado las riendas de su propia vida, que es un poco la historia de superación y crecimiento que queríamos contar también para esta madre sufridora", analiza, y es que la suya ha sido la historia de superación que pedía la trama, con un "empoderamiento paulatino gracias a la falsa Paula, quien le ha ido abriendo los ojos hasta que logra hacerle frente a Fernando".

Balance final "muy positivo"

Tras 15 capítulos y dos temporadas, el balance para su creador es "muy positivo": "El tramo medio de la historia era el más complicado porque había mucha información que transmitir al espectador, pero estamos muy satisfechos porque hemos contado la historia que queríamos ofreciendo diferentes clímax, tanto narrativos como emocionales. Siempre tuvimos claro que había que llegar a este desenlace que muestra el lado más maquiavélico de Fernando, capaz de matar a una niña por un ataque de cuernos y por mantener su posición social".

Pese a su dureza, prosigue reflexionando Benítez, "acabamos con un final en alto que deja un mensaje bastante positivo: los buenos terminan en una buena situación, con algo bastante próximo a la felicidad (aunque Marcos tenga que sacrificarse); y con el gran malvado pagando por todos sus pecados. Ahora una gran mentira se ha convertido en una verdad, aunque tanto los protagonistas como el público son cómplices de que no es así. Estamos muy contentos con el resultado y esperamos que la audiencia también".