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El nutricionista Pablo Ojeda (La Sexta) se abre en canal sobre el "infierno" de la adicción tras haber sido ludópata
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El nutricionista Pablo Ojeda (La Sexta) se abre en canal sobre el "infierno" de la adicción tras haber sido ludópata

El popular rostro de La Sexta se ha sincerado en un programa de radio sobre su peor etapa y la difícil rehabilitación: "Estuve tres años y medio en un centro"

Foto: Pablo Ojeda. (La Sexta)
Pablo Ojeda. (La Sexta)

"Quizá mi participación pública más sincera". Así de contundente ha valorado Pablo Ojeda su última intervención en Las mañanas Kiss. No es la primera vez que el mediático nutricionista de La Sexta se abre en canal sobre su adicción al juego, pero, como él mismo reconoce, probablemente es la vez que con mayor claridad ha hablado de ese infierno y, sobre todo, de cómo ha logrado salir de él.

El popular nutricionista era este jueves, 18 de enero, uno de los invitados del espacio matinal de radio para hablar de diferentes cuestiones, pero la que más ha llamado la atención de los presentadores ha sido, sin lugar a dudas, su lucha contra la adicción al juego. "Me enganché hace muchos años, estuve muy metido en la ludopatía. Este tema te hace encontrarte con lo peor de ti, bajas a lo más profundo del infierno. Cuando ya me pegué la gran hostia fue cuando me di cuenta de que tenía que poner solución aquello y entré en un centro de rehabilitación. Estuve tres años y medio en ese centro de rehabilitación por el tema del juego", compartió con los locutores, que parecían desconocer ese delicado episodio de la vida de Ojeda.

Hay que remontarse 13 años atrás para conocer esa historia: "Cuando estuve allí me di cuenta de que cuado tapaba un agujero, salía otro. Esto quiere decir que, cuando la gente dejaba de jugar, empezaba a comer compulsivamente. El que no comía compulsivamente, compraba compulsivamente. El que no compraba compulsivamente, trabajaba compulsivamente. Es decir, cuando un interno solamente tapaba el juego y no trabajaba nada más, la adicción salía por otro lado. Ese descontrol de los impulsos volvía a florecer".

Es por esto que, en su caso, lo que menos le costó fue dejar de jugar, como él mismo explica: "A mí lo que me costó trabajo fue dejar a mis colegas, dejar de ir al bar donde iba, dejar el alcohol,... Lo que me costó trabajo fue rellenar el espacio del juego con otras cosas. Entonces empecé a estudiar, y aquello me llenó mucho".

A partir de ahí fue cuando Pablo se dio cuenta de la importancia de mantener su mente siempre ocupada y, sobre todo, de llevar una meticulosa planificación de las cosas: "¿Por qué siempre digo el tema de la planificación de los horarios? Porque mi mente, como el 90% de las mentes que veo en consulta, tienen cierto descontrol de los impulsos. Yo no puedo tener mi cabeza pensando sin hacer nada, necesito planificar, que mi mente esté tranquila y sepa lo que viene a continuación. Necesito establecer unos horarios sí o sí".

Es por esto que para el colaborador de Atresmedia "el gran trabajo no es comer bien, sino todos esos factores que hacen que coma mal": "No te centres en la comida, no te centres en el juego,... No te centres solamente en una cosa, sino en todos aquellos aspectos que hacen que florezca esa impulsividad. Es mucho más psicológico. Son temas muy jodidos porque son muy tabúes y están muy presentes en nuestra sociedad. Como son tan tabúes, cuesta después dar el paso al frente para pedir ayuda. Pedir ayuda es de superhéroes, es de valientes. Lo cobarde es esconderse", sentenció con rotundidad, mirando directamente a cámara para interpelar a los oyentes a dar el paso de luchar contra sus adicciones, identificar sus problemas y mejorar su vida.

"Quizá mi participación pública más sincera". Así de contundente ha valorado Pablo Ojeda su última intervención en Las mañanas Kiss. No es la primera vez que el mediático nutricionista de La Sexta se abre en canal sobre su adicción al juego, pero, como él mismo reconoce, probablemente es la vez que con mayor claridad ha hablado de ese infierno y, sobre todo, de cómo ha logrado salir de él.

Pablo Ojeda
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