"Me he quedado sin palabras": los nervios enmudecen a dos solteros en plena cita de 'First dates'

Ir a la televisión no es fácil y menos si es por primera vez. Si esto lo trasladamos a un plató lleno de cámaras, como el restaurante de First Dates, la experiencia puede resultar, cuanto menos, intimidante. Esto es lo que pudo enmudecer a una pareja de solteros en el programa de citas de Cuatro, a los que les costó abrirse delante de las cámaras del dating show.

David se define como una persona extrovertida con sus amigos, pero introvertida a la hora de conocer gente, es por ello que entró al formato presentado por Carlos Sobera "más nervioso que un flan". "Si ahora mismo me dieran la opción de salir corriendo… no lo haría, pero sigo estando muy nervioso", comentaba nada más entrar por la puerta del restaurante del programa.

Tras conocer a su cita de la noche, Martina, italiana y localizadora de videojuegos, el soltero se quedaba mudo: "Me he quedado sin palabras porque ya la tenía delante. Y una vez que la tienes delante, yo qué digo ahora para no parecer un completo imbécil, que ya lo estoy pareciendo". Un bloqueo que percibió la italiana, que se sentía igual que su compañero de velada: "Se notaba que estaba un poco bloqueado. Y yo también, la verdad".

"El hecho de que me haya gustado ha influido en que esté más nervioso"

Ya en la mesa, durante la cena, los solteros no terminaron de encontrarse cómodos del todo: "Estoy nervioso de cojo***", comentaba, visiblemente cortado, David, a lo que Martina le contestaba que ella se sentía igual. "No sé si fue que estábamos los dos muy tímidos o que no tenemos mucho que compartir… Pero creo que fue más la timidez", explicaba la italiana, tratando de justificar su actitud durante la cena.

Tras algunos silencios incómodos, al salir a relucir la profesión de Martina, relacionada con los videojuegos, ambos se explayaron más, al ser una afición en común. "Me gusta mucho que él sea un amante de los videojuegos porque también busco a alguien con el que poder compartir una de mis aficiones favoritas", confesaba la soltera.

La cena continuaba, pese a la timidez y a los silencios de ambos. "No me gusta hablar con la boca llena, entonces estoy un poco así como… más calladito", trataba de explicar el soltero, que se encontraba preocupado por la decisión final de su cita ya que, aunque ambos verbalizaran pocas palabras durante la velada, sí que sentía cierta atracción por la italiana. "El hecho de que me haya gustado ha influido en que esté más nervioso", revelaba. Unos sentimientos que parecían recíprocos por parte de Martina: "Me gusta que sea así como un poco tímido".

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Antes de la decisión final, el soltero comentaba que seguía nervioso e invitaba a la localizadora de videojuegos a probar unas cervezas artesanales fuera del programa. Finalmente, ambos decidieron tener una segunda cita: "Como no podíamos hablar mucho porque teníamos muchos nervios, a lo mejor con un par de cervezas y tal podemos conocernos un poco mejor".