"¡A tomar viento!": una soltera despacha a su cita antes de tiempo en 'First Dates'

María se fue algo contrariada de su cita con Ricardo en First Dates. La mujer se decepcionó cuando el soltero le dijo sus requisitos inamovibles para formar una relación y ya no quiso continuar cenando con él.

La soltera de 80 años y el soltero de 82 no acudieron solos al restaurante más famoso de la tele, les acompañaron sus hijas. Las dos siguieron el encuentro desde la terraza e incluso, en un principio, llegaron a coincidir en que hacía muy buena pareja juntos.

"¡A tomar viento! ¡Niña, ya puedes traer el postre, guapa!"

Sin embargo, Ricardo echó por alto la velada cuando, después de ponerse al día de sus gustos y anteriores relaciones, le dio a entender que quiere una mujer, pero cada uno en su casa. María, por contra, busca a alguien con quien compartir la vida, pero viviendo los dos juntos, "por si caemos malos uno de los dos, cuidarnos", entre otras cosas, como salir a bailar, cenar o pasear.

"Son muchos años ya, 82 años. ¿Cómo me voy a poner a cuidar de una persona?", sentenció el señor, totalmente en contra de no compartir ni tareas del hogar ni las actividades dentro de casa. Pero cuando la dejó totalmente a cuadros fue al revelarle que tiene una relación muy estrecha con su vecina, con quien sale a pasear y le da bastante compañía: "No estoy tan solo".

"A mí no me gusta eso. ¿Qué tiene que estar esa mujer con él? Con quien tiene que estar es conmigo y hacer los dos lo que nos dé la gana", confesó ella, indignada, y cada vez más desencantada con su cita. Ricardo insistió en que Sabadell está un poco lejos de la zona donde él reside, lo cual le chirría formalizar una pareja con ella. "A mí no me gusta estar sola, si tengo una pareja es para estar los dos juntos. Pero bueno, las cosas van como van", le lanzó María, totalmente cabizbaja por el chasco.

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De hecho, ni corta ni perezosa, pidió prácticamente terminar la cena cuanto antes: "¿Sabes qué? Dije: '¡A tomar viento!'. ¡Niña, ya puedes traer el postre, guapa!". Elsa Anka se sorprendió, ya que pensaba que ambos habían congeniado a la perfección: "¿El postre ya?". Los dos rechazaron volver a tener un segundo encuentro y María abandonó el set de grabación totalmente contrariada por la actitud que había tenido Ricardo durante la cena.