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Pilar Rubio, desterrada a la publicidad tras su fracaso televisivo
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Pilar Rubio, desterrada a la publicidad tras su fracaso televisivo

Pilar Rubio cogió carrerilla cuando llegó a Telecinco. Una noticia que ni se filtró ni se rumoreó en los medios. La llegada de la reportera estrella

Pilar Rubio cogió carrerilla cuando llegó a Telecinco. Una noticia que ni se filtró ni se rumoreó en los medios. La llegada de la reportera estrella de laSexta a Mediaset pilló a todos por sorpresa y los proyectos no tardaron en llegar. Ahora, desde que el grupo decidiese no renovar su contrato por falta de planes para la presentadora desde el pasado mes de diciembre, Rubio ha pasado de repartir microfonazos a ser perseguida por los mismos. De cubrir photocalls a ser carne de alfombra roja. Un cambio de rutina que tuvo que asumir después de varios fracasos televisivos que parecen no afectarle. “Se vive muy bien así y no me da tiempo a pensar en las cámaras”, dijo el pasado martes en uno de esos eventos nocturnos en los que ahora es mucho más asidua.

Compartió fuga de formato con ¡Más que baile! (antes en TVE) como primer proyecto en Telecinco. Después de siete ediciones en la pública con Anne Igartiburu al frente, Pilar Rubio no supo convencer al espectador y se convirtió en la segunda edición menos vista con el fenómeno Belén Esteban entre sus filas. Mucho se ha rumoreado sobre la vuelta del programa pero nada se ha vuelto a hacer. No sería el único formato que desaparecería en manos de Pilar Rubio.

En su firma con Telecinco estaba todo bien cerrado. La reportera quería presentar, pero también quería tener proyectos de ficción en su currículum. Y así lo hizo. De la mano de Mandarina, la productora de confianza de Telecinco, Pilar Rubio se convirtió en la protagonista de la serie Piratas. Un proyecto que no pasó inadvertido el día de su lanzamiento, 17,2% de cuota de pantalla en el día de su estreno, pero que se fue deshinchando hasta su final, un 10,3%. En ficción Pilar Rubio tampoco era convincente.

Por sus manos han pasado proyectos como Cántame una canción, XXS o Todo el mundo es bueno. Este último fue el más fugaz, retirado del prime time a las tres emisiones. Sin embargo, el formato que más dolió en la cadena fue el de Operación Triunfo. El talent por excelencia sólo pudo despedirse de forma precipitada en sus manos después de siete ediciones. 35 días de Academia que sólo alcanzaron un 13,9% de cuota de pantalla media.

Este año ha sido un cambio a nivel laboral. Ha sido un año de escucharme a mí misma porque antes no me daba tiempo. Se está muy bien así. Hago lo que realmente me gusta y me apetece. Antes no me daba tiempo a pensar en mí”. Antes estaba bajo el paraguas de Mediaset España, un grupo del que estuvo cobrando más de medio año desde que terminase su último proyecto. Telecinco no tuvo más remedio que desprenderse de la presentadora, que logró encandilar a muy pocos espectadores.

La televisión española parece no tener hueco para la madrileña, que ha preferido rendirse a los encantos publicitarios para no desaparecer de la pequeña pantalla. “A mi oficina llegan un montón de proyectos”, dice, sin embargo. “Pero ahora me apetece tomármelo con calma y hacer lo que realmente quiero hacer. Ya no puedes hacer cualquier cosa. No te apetece hacer cualquier cosa”. Hace unas semanas la actriz, presentadora, reportera y modelo ya dijo que “fuera de España” se la rifan como actriz. Su currículum laboral, sin embargo, sigue vacío. De momento.

Pilar Rubio cogió carrerilla cuando llegó a Telecinco. Una noticia que ni se filtró ni se rumoreó en los medios. La llegada de la reportera estrella de laSexta a Mediaset pilló a todos por sorpresa y los proyectos no tardaron en llegar. Ahora, desde que el grupo decidiese no renovar su contrato por falta de planes para la presentadora desde el pasado mes de diciembre, Rubio ha pasado de repartir microfonazos a ser perseguida por los mismos. De cubrir photocalls a ser carne de alfombra roja. Un cambio de rutina que tuvo que asumir después de varios fracasos televisivos que parecen no afectarle. “Se vive muy bien así y no me da tiempo a pensar en las cámaras”, dijo el pasado martes en uno de esos eventos nocturnos en los que ahora es mucho más asidua.