Escándalo racista en un hospital de Canadá: insultaban a una mujer mientras agonizaba

Joyce Echaquan ingresaba el sábado 26 de septiembre en un hospital de Joliette, una pequeña ciudad canadiense de apenas 20.000 habitantes situada en la provincia de Quebec. La mujer, de origen indígena, se quejaba de fuertes dolores en el estómago, pero lo que recibió no fue la atención médica que necesitaba, sino insultos y vejaciones por parte de los propios sanitarios.

Fue la propia Joyce quien se grabó en el hospital, mientras esperaba a ser atendida, y pudo recoger insultos y comentarios despectivos hacia su persona. De hecho, grabó a una enfermera diciendo que lo único para lo que era buena era para mantener relaciones sexuales, debido a que la mujer era madre de siete hijos. Un comentario fuera de lugar, pero que no fue el peor.

En el mismo vídeo se puede escuchar a una mujer hablando en francés que llama a Joyce "estúpida como el infierno", al mismo tiempo que le pregunta en tono jocoso: "¿Terminaste de actuar como una estúpida, terminaste?" Pero la indígena no estaba fingiendo: murió dos días después en el mismo hospital por no haber recibido los cuidados médicos necesarios.

Despido fulminante

François Legault, primer ministro de Quebec, ha querido zanjar este problema de raíz: "Lo que dijo la enfermera es totalmente inaceptable, es racista y fue despedida. Debemos luchar contra este racismo". Además, Legault ha anunciado una investigación en la que participará un patólogo forense especializado en muertes en extrañas circunstancias o en las que hay sospecha de negligencia.

Una enfermera la acusó de "haber hecho malas elecciones en tu vida, querida. ¿Qué van a pensar tus hijos viéndote de esta manera?"

El máximo mandatario de Quebec no es el único que ha mostrado su indignación por lo sucedido. Otras autoridades han reconocido el problema de fondo que existe en Canadá con las personas de origen indígena y el propio pueblo Atikamekw, al que pertenecía Joyce Echaquan, asegura que lo sucedido "demuestra claramente el racismo contra las naciones originarias".

Este episodio no es circunstancial. Según recoge la BBC, en 2019 se llevó a cabo una investigación lanzada por el propio gobierno canadiense y que concluyó que el Estado "fue cómplice de un genocidio basado en la raza" y que afectaba a mujeres indígenas. De hecho, ese informe revelaba que esas mujeres tenían 12 veces más probabilidades de ser víctima de asesinato o desaparición si las comparaban con cualquier otro grupo de mujeres de Canadá.