A los aeropuertos ahora desiertos, en unas semanas comenzarán a llegar miles de turistas. AENA y el Ministerio de Sanidad preparan un protocolo que podría ir más allá del que ahora cumplen los españoles que vuelan por necesidad: les toman la temperatura y rellenan un formulario con sus datos de contacto. Algunos países ya han anunciado que exigirán una prueba PCR reciente, aunque tampoco es una garantía. Con el control de temperatura no se detecta a los asintomáticos. Así que habrá que asumir que reactivar el turismo tendrá sus riesgos. Sanidad apela a la responsabilidad de los pasajeros: que no viajen si tienen síntomas y si los desarrollan que se pongan en contacto en seguida con un centro sanitario.