El primer gran proyecto de lujo que planta cara a la crisis y al coronavirus es un antiguo palacete del siglo XVII situado en el número 8 de la Plaza Tirso de Molina y lo hace a los precios que la propiedad había fijado a principios de año, antes de que estallara la crisis sanitaria y económica.
Los precios oscilan entre 510.000 euros y el millón de euros -para viviendas entre 97 y 207 metros cuadrados-, en torno a los 6.000 euros el metro cuadrado, ligeramente por debajo de los precios alcanzados en Santa Isabel 21, otro proyecto de 1810 Capital Investment, cuya venta se completó en pleno estado de alarma con la adquisición de su último ático de 165 metros cuadrados por parte de un inversor latinoamericano por poco más de un millón de euros.