Si el Solar Impulse 2 nos sorprendió con su forma de volar por todo el globo solo propulsado con energía solar, el Energy Observer, es su homólogo en los mares. Este catamarán deportivo de 30 toneladas empieza este mes de abril, tras un año moviéndose por Francia, su vuelta al mundo con el objetivo de demostrar el poder de las energías renovables y, además, añadir otro factor clave, el hidrógeno.
Gracias a sus 130 metros cuadrados de paneles solares, este barco es capaz de generar energía que transforma en hidrógeno gracias a un electrolizador, para poderla almacenar y usar cuando más lo necesita. Así, sin gastar una sola gota de combustibles fósiles, el navío de origen francés surcará de aquí a 2022 todos los mares del planeta, parando 101 veces en un total de 50 países. De conseguirlo, será el primer barco eléctrico impulsado por energías renovables que consigue dar la vuelta al mundo.
Sus primeros 8 meses de travesía fuera de su país los pasará en el mar Mediterráneo, en el cual sus desarrolladores, que han invertido unos 5 millones de euros en el proyecto, mostrarán a toda esta región el poder de su barco y comprobarán si están en condiciones para ir mucho más lejos.