Los científicos y pensadores que forman parte de esta galería, retratados magistralmente por la ilustradora Eulogia Merle, cuyas interpretaciones han sido difundidas por la Agencia Sinc, son los más influyentes de la Historia, al menos desde el prisma de que sus libros han marcado el devenir de la ciencia en distintas disciplinas. Ésta es la tesis, y el hilo conductor, de la muestra Libros inmortales, instrumentos esenciales, que acaba de inaugurarse en la sede del Museo Nacional de Ciencia y Tecnología (MUNCYT) de La Coruña, tras su paso por Madrid.
Aquí se recogen obras que han trascendido el paso del tiempo, la mayoría conocidas por todos, desde la Física de Aristóteles y los Tratados Hipocráticos; pasando por El origen de las especies; hasta la Teoría de la relatividad especial y general.
Otras no son tan conocidas, pero igual de importantes, como De la estructura del cuerpo humano, de Andrés Vesalio. Sólo hay un español en esta lista. Ramón y Cajal, con su tratado Textura del sistema nervioso del hombre y los vertebrados. Y sólo se reseña la obra de una mujer: el Tratado de radioactividad, de Marie Curie.