Es noticia
Empresas familiares y altos patrimonios: un matrimonio financiero de conveniencia
  1. Mercados
  2. Inversión
estudio global de kpmg

Empresas familiares y altos patrimonios: un matrimonio financiero de conveniencia

Un estudio elaborado por KPMG en 29 países certifica que las empresas familiares y los altos patrimonios están condenados a entenderse. Les interesa a los dos

Foto:

Las empresas familiares admiten que tienen problemas para financiarse. Los altos patrimonios reconocen que buscan activos en los que invertir a largo plazo. Las unas y los otros, por tanto, están condenados a entenderse. Es la principal conclusión que arroja un estudio que KPMG ha elaborado a partir de las opiniones recabadas en ambos sectores en 29 países distintos.

A escala global, 6 de cada 10 empresas familiares aseguran que están buscando alternativas de financiación en estos momentos. Sin embargo, no les resulta fácil porque para ellas resulta crucial preservar la mayoría de la participación en la sociedad. Como muestra, en el 76% de las empresas encuestadas la familia mantiene ese porcentaje mayoritario.

Estas necesidades pueden encontrar respuesta en los particulares con altos patrimonios. Más que nada, por los puntos coincidentes, ya que estos patrimonios buscan alternativas de inversión que proporcionen retornos a largo plazo, en tanto que las empresas precisan financiación que les ayude a acometer inversiones a largo plazo.

En el caso español, el 80% de las empresas familiares encuestadas afirma haber contado ya con financiación procedente de altos patrimonios, una aportación que valoran "positivamente". "Los inversores particulares con grandes patrimonios muestran interés por convertirse en una fuente de financiación de negocios familiares, mediante capital o mediante financiación subordinada, ya que valoran la tradición y la confianza que inspira la empresa familiar", explica Juan José Cano, socio responsable de Empresa Familiar de KPMG en España. Y añade: "Al mismo tiempo, estos inversores constituyen para las empresas familiares un recurso excelente porque no solo respetan la privacidad de la familia, sino que también, al proporcionar financiación, permiten que las empresas familiares consoliden prácticas de buen gobierno e introduzcan nueva experiencia y conocimientos para el desarrollo del negocio.

Las empresas familiares admiten que tienen problemas para financiarse. Los altos patrimonios reconocen que buscan activos en los que invertir a largo plazo. Las unas y los otros, por tanto, están condenados a entenderse. Es la principal conclusión que arroja un estudio que KPMG ha elaborado a partir de las opiniones recabadas en ambos sectores en 29 países distintos.

KPMG Inversores Empresa familiar