Frustración en Lehman España: “Los gestores en New York han hundido la firma por salvar su culo”

Frustración y cabreo no disimulado entre el personal de la sucursal ibérica –España y Portugal- de Lehman Brothers, subsidiaria al 100% de la matriz americana, que el año pasado ganó 170 millones de dólares, y que este año tenía previsto volver a hacerlo en cuantía cercana a los 100 millones. Las quejas van dirigidas contra el senior management en Nueva York, “que, al margen de los errores cometidos en el año y pico largo de crisis financiera internacional, en el último tramo de la misma ha jugado a salvar su sillón sin que les haya importado llevarse por delante una firma como ésta más que centenaria”.

El banco, que en la península estaba presidido por el ex secretario de Estado de Economía Luis de Guindos, pasó ayer a manos de los administradores judiciales de la quiebra, la firma PriceWaterhouseCoopers. Cuando a primera hora del lunes se confirmó en la oficina de la madrileña Plaza de la Lealtad la dimensión de la tragedia, “lo que hicimos fue decirle a la gente de la mesa de contratación que no hicieran ninguna nueva operación y liquidaran las posiciones contraídas el jueves y el viernes pasado. En realidad, es lo único que cabía y cabe hacer aquí: liquidar la firma de la forma más ordenada posible, y esto va a ir muy rápido”.

Tan rápido como que ayer mismo se dejó de pagar la luz, el teléfono y el alquiler de la elegante instalación, sita al lado del Hotel Ritz de Madrid y en frente de la sede de la Bolsa. Tan rápido como que ayer mismo, cuando algún ejecutivo quiso pagar un café y un vaso de agua con la Visa de Lehman, se encontró con que ya había sido anulada. “Solo nos queda velar por los clientes y por nuestros empleados, ver qué podemos hacer por ellos, aunque en la caso de los clientes con quienes teníamos operaciones en marcha como banco de negocios eso es ahora mismo una incógnita”.

Con independencia de la negligencia dolosa demostrada por el management de la firma en Nueva York, con el chairman Richard Fuld al frente, “lo cierto es que hemos tenido muy mala suerte en el tramo final, porque está claro que la Reserva Federal no podía hacer frente al mismo tiempo a la crisis de dos colosos como Lehman y Merrill Lynch, de modo que, forzado a elegir, ha optado por evitar el mal mayor salvando a Merrill, que tiene más riesgo y más plantilla, dejando a Lehman a su suerte. El resultado es que las ayudas han ido a Merrill Lynch, es decir, a Bank of America, lo cual ha impedido que prosperase la oferta de  Barclays por Lehman”.

Ofertas de Bank of America y Barclays

Dicho lo cual, “la gerencia de Nueva York ha tenido al menos dos oportunidades de eludir el colapso en los últimas días, incluso en las últimas horas, y nuestra gente no lo ha querido hacer por salvar su culo, por conservar su sillón”. ¿Qué ocasiones han sido esas? “No es el momento de entrar ahora en esa cuestión, pero ha habido ofertas de Bank of America, de Barclays y de fondos soberanos árabes. No es cierto que el Santander haya estudiado la posibilidad de entrar en la puja, como afirman algunos rumores en Madrid”. ¿Por qué no han aprovechado alguna de tales oportunidades? “Seguramente por uno más de los errores de cálculo que han llevado la firma a la quiebra”.

En Nueva York pensaban que el ciclo recesivo iba a ser más corto y que, con la inercia de los buenos resultados logrados en el ejercicio de 2007, iban a ser capaces de mejorar la posición de liderazgo de Lehman en la industria. Y ni lo uno, ni lo otro. “No han sido capaces de reconocer que se habían equivocado, se han callado como muertos, han intentado tapar la situación y han terminado llevándose a la firma por delante”. En la sede madrileña se respira una sensación de desolada impotencia ante lo ocurrido: “Una pena, porque nos hemos dejado aquí la vida por colocar a Lehman donde está ahora, una firma muy rentable en España y Portugal, y todo para nada…”