El Ibex entra en negativo en el año asfixiado por la presión de la deuda

Jornada de abultadas caídas en toda Europa en la sesión del martes que estuvieron provocadas por el importante repunte global de los mercados de deuda. La jornada comenzó con la decisión del Banco de Japón de no modificar sus políticas monetarias, algo que no cumplió con las expectativas de unos inversores que castigaron con dureza al Nikkei (-1,45%). Con la apertura de mercados, Europa siguió la estela marcada por Japón y desde el inicio de sesión todos los índices apostaron por las pérdidas, que a medida que discurría el día se fueron acentuando.

Las dudas ante la decisión del Tribunal Constitucional alemán sobre la legalidad de las OMT fue uno de los motivos que incrementó las ventas y, concretamente, la posibilidad de que el TC decida que el hecho de que el programa de compras de bonos sea "ilimitado" va en contra de las leyes del país germano. Tanto el ministro de Finanzas germano, Wolfgang Schäuble, como la canciller alemana, Angela Merkel, se mostraron durante la jornada convencidos de que el programa de compra de bonos cumple con la legalidad de Alemania. Con sus palabras, debilitaron la posición del presidente del Bundesbank, Jens Weidmann, que en su comparecencia ante el Constitucional alemán se ratificó en su postura contraria a las OMT y aseguró que el Banco Central Europeo "se puede convertir en prisionero del programa de compras de bonos soberanos".

Sin embargo, las declaraciones de Merkel y Schäuble defendiendo las políticas de la institución que dirige Mario Draghi no consiguieron contener al mercado de deuda, que reaccionó con fuertes subidas, especialmente en los casos de los países periféricos. En España, la prima de riesgo cerró en los 305 puntos y la rentabilidad del bono a 10 años subió un 1,29%, hasta el 4,65%. En el caso italiano, el riesgo país llegó a los 276 puntos y el bono a 10 años al 4,35%.

A ello, se añade la incertidumbre que desde hace semanas domina el mercado estadounidense, como resultado de la posibilidad de que la Reserva Federal modere el nivel de las inyecciones de liquidez. Ya en la jornada del lunes, el bono estadounidense a 10 años superó la barrera del 2,2% y, aunque el martes consiguió rebajar su interés, todavía se mantiene por encima del 2,1%

Asfixiado por estos niveles de rentabilidad de deuda, el Ibex 35 perdió un 1,68%, hasta los 8.089 puntos, con lo que en el año cede un 0,96%. En el resto del Viejo Continente, en donde el selectivo español lideró las caídas, el Mib italiano se dejó un 1,63% y el Cac de París cerró con una caída del 1,39%. Por su parte, el Eurostoxx 50 cayó un 1,33%, el Dax un 1,03% y el Ftse 100 londinense un 0,94%.

De vuelta al parqué madrileño, las entidades bancarias, principales tenedoras de deuda soberana, sufrieron especialmente en la sesión: Banco Popular cayó un 3,17%, Banco Santander se dejó un 2,11%, BBVA un 2,02% y CaixaBank un 1,87%. Lo mismo ocurrió con Mapfre, empresa que cuenta con una amplia cartera de deuda y que el martes fue el segundo valor que más terreno cedió al caer un 3,99%.

Entre el resto de grandes valores del Ibex 35, en el que sólo Amadeus y Viscofan acabaron en verde, Telefónica se dejó un 1,07%, hasta los 10,21 euros, Repsol cedió un 0,63% (17,31 euros).