Bomberos de Madrid, a nado en la calle por la tormenta y obligados a ser rescatados en lancha

Una gran tormenta ha azotado Madrid en la tarde de este lunes, 29 de mayo, y ha dejado imágenes de lo más sorprendente con las calles anegadas. La acumulación de agua ha obligado a cortar tres líneas de Metro, carreteras, autopistas y ha acumulado retrasos en Cercanías. Los servicios de emergencias del Ayuntamiento y de la Comunidad de Madrid han realizado más de 300 intervenciones en menos de tres horas, con enormes complicaciones causadas en su mayoría por grandes balsas de agua que han anegado exteriores e interiores por toda la región.

Las lluvias torrenciales de la tarde inundaron varios supermercados y hasta los almacenes y la farmacia del Hospital Ramón y Cajal. El caos ha sido tal que hasta los Bomberos han tenido que ser rescatados en una lancha. Ha ocurrido en la calle Costa Brava de Mirasierra. Acudieron por un aviso de que podía haber atrapadas personas en los coches sumergidos, finalmente no había nadie en situación de peligro.

Los bomberos, ante la gran balsa de agua que se encontraron, tuvieron que refugiarse en el techo de su camión y otros lograron salir a nado. El agua acumulada llegaba a la altura del pecho de una persona adulta. Así, en un par de horas, cayeron hasta 37 litros por metro cuadrado en la zona de Arturo Soria y 27 litros por metro cuadrado en Plaza de Castilla.

Incidencias en Cercanías

A las 19.13 horas y hasta las 20.15, se vio interrumpida la circulación en la L5 entre las estaciones de Pirámides y Urgel, en ambos sentidos, por acumulación de agua. Lo mismo sucedió en las líneas de Metro L7 entre Pueblo Nuevo y Cartagena y en L10 entre Fuencarral y Begoña, en ambos sentidos. A las 19.50 horas, Metro Madrid anunciaba que se reestablecía la circulación en L10 y en L7 entre Canal y Guzmán el Bueno y entre Pueblo Nuevo y Cartagena.

En Cercanías Madrid también hubo incidencias y los trenes circulaban con debido a desperfectos en la infraestructura entre Recoletos y Nuevos Ministerios, provocada por las condiciones meteorológicas de la zona. Los cerca de 300 expedientes que se gestionaron por la tormenta, fueron principalmente por balsas de agua en la vía pública, la mayoría en la ciudad de Madrid. En cuanto al estado del tráfico aéreo, Aena ha alertado de "fuertes tormentas" en el aeropuerto de Barajas, lo que ha provocado desvíos de algunos vuelos a otros aeropuertos cercanos.