Es noticia
La prensa extranjera: el veto a los toros acentúa la fracción social entre España y Cataluña
  1. España
  2. Cataluña
EL FINANCIAL TIMES, EL ÚNICO CLARAMENTE A FAVOR DE LA DECISIÓN TOMADA AYER

La prensa extranjera: el veto a los toros acentúa la fracción social entre España y Cataluña

Con sorpresa, haciendo una interpretación política y poniendo poca atención en la defensa de los animales. Así se ha colado el veto taurino del Parlamento catalán en

Foto: La prensa extranjera: el veto a los toros acentúa la fracción social entre España y Cataluña
La prensa extranjera: el veto a los toros acentúa la fracción social entre España y Cataluña

Con sorpresa, haciendo una interpretación política y poniendo poca atención en la defensa de los animales. Así se ha colado el veto taurino del Parlamento catalán en los grandes medios internacionales. El debate sobre la fiesta nacional española ha viajado desde Nueva York a Roma pasando por Londres, París, Alemania… e, incluso, Marruecos. Todos los medios buscan una explicación a esta prohibición.

En Francia, un país donde en algunas regiones se vive con pasión el arte del toro, el debate no ha pasado desapercibido. “Victoria histórica para los contrarios a la tauromaquia”, inicia su artículo Le Monde. Este diario habla de la "fracción social" que genera la medida, de las pérdidas económicas para el sector, de la agresión cultural y de razones políticas. Para Liberation, se trata de “un duro golpe para el mundo taurino en un contexto de caída de espectadores y de crisis”.

Le Figaro va un paso más allá. El diario, que habla de libertad frente a la tortura animal, apunta a que algunos diputados franceses están tomando ejemplo de la iniciativa catalana para promover el veto taurino en el país galo. Valga de ejemplo las declaraciones de una asociación taurina de Nimes, uno de los pueblos del sur de Francia donde los toros están más arraigados: “Una gran victoria, un veto simbólico que seguramente pasará en Francia en los próximos años”.

Para Henry de Laguerie, periodista de la cadena francesa Radio Europe 1, este tema interesa mucho en su país. La decisión le causó sorpresa ya que “el toro sigue siendo el símbolo de España, aunque mucho  menos que hace treinta años”. "En Francia la mayor parte de la gente está en contra de los toros y nos les interesan", pero "esta polémica sí les interesa porque los toros siguen siendo un símbolo de España", ha dicho Tamon Marc, corresponsal de France 3 Sud.

Motivos políticos

Para otros muchos medios, la prohibición de los toros en Cataluña tiene un trasfondo político, una lucha entre España y el independentismo. Así lo interpreta el diario New York Times. Para el rotativo, el veto taurino es “un duro golpe a una tradición que muchos españoles consideran una parte esencial de su patrimonio cultural”. Sin embargo, tras este debate se oculta el problema de la identidad catalana. Habla del independentismo, del doblaje al catalán y de cómo el separatismo ha ganado terreno desde la muerte de Franco. Además, considera que el sector está en crisis ya que hay “menos financiación pública”.

En la misma línea se mueve el Corriere della Sera. También busca un trasfondo político. Dice que “la decisión de Cataluña representa el enésimo distanciamiento de la región de Madrid y el debate de sus culturas y tradiciones”.

Pero el debate español de los toros también se ha colado en la portada del Financial Times, entre las cotizaciones y los resultados de empresas. El diario británico critica el mundo del toro y se escuda en el carácter cosmopolita de Barcelona, donde “no hay ningún tipo de tradición taurina”. Dicen que se trata de “un sangriento espectáculo”. Además, defiende que sólo parte de las personas mayores están a favor de la fiesta nacional y todos los menores de treinta se oponen. Sin duda, un debate que todavía no ha terminado.

Con sorpresa, haciendo una interpretación política y poniendo poca atención en la defensa de los animales. Así se ha colado el veto taurino del Parlamento catalán en los grandes medios internacionales. El debate sobre la fiesta nacional española ha viajado desde Nueva York a Roma pasando por Londres, París, Alemania… e, incluso, Marruecos. Todos los medios buscan una explicación a esta prohibición.