En este pueblo no nacía nadie hace 20 años, pero llegó Olmo y ahora es el vecino más famoso

Desde hace unos meses es el protagonista indiscutible de Ledigos, un municipio palentino de apenas sesenta habitantes, que llevaba más de dos décadas sin registrar ningún nacimiento. Olmo nació el pasado año y, desde entonces, es el vecino más popular de un pueblo en el que no vivía un niño desde hace más de veinticuatro años.

Desde su nacimiento, el pequeño Olmo se ha convertido en el vecino más joven y popular de una localidad que no cuenta con más niños viviendo a diario. Sus padres, Belén Sesé y Adrián Quintanilla, se asentaron en Ledigos persiguiendo el sueño de poner en marcha Cervezas La Vereda, una fábrica de cerveza artesanal que, además de ser su propio negocio, también había sido su gran ilusión.

Una vez en el rural, Sesé y Quintanilla decidieron formar una familia. El embarazo y los primeros días de vida del pequeño Olmo no fueron fáciles. Sesé explica que se han tenido que trasladar hasta la capital palentina, situada a más de cincuenta kilómetros, para poder recibir asistencia sanitaria en el momento del parto, ya que ahí estaba ubicado el hospital más cercano.

Desde el año 2020, Ledigos no cuenta con médico ni con consultorio propio y sus vecinos, para ser atendidos, tienen que desplazarse hasta la localidad vecina de Villada, donde hay servicio sanitario una vez al mes. A pesar de ello, Sesé reconoce que vivir en el medio rural tiene muchas más ventajas que inconvenientes.

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"Lo mejor de vivir aquí es la tranquilidad que tiene el niño, poder compartir tiempo con su familia, a quienes tienes al lado, y la naturaleza de la que puede disfrutar. Además, nosotros hemos encontrado una guardería pública y gratuita con una gran flexibilidad que nos ayuda muchísimo. Nosotros somos autónomos", explica Sesé.

La conciliación en el medio rural es también más fácil gracias a programas puestos en marcha por la Junta de Castilla y León como el de Crecemos que permiten tener estos centros educativos para niños menores de tres años subvencionados. "Esto nos facilita mucho todo", reconoce la madre de Olmo, quien afirma que una de las partes negativas es la falta de niños como su hijo en el pueblo.

"En un futuro nos va a tocar trasladarnos a poblaciones cercanas para que el niño vaya a actividades extraescolares, por ejemplo. Eso si no se traslada ninguna familia hasta aquí para vivir", sostiene Belén Sesé quien destaca la gran acogida que ella y su familia han tenido en un pueblo que está volcado con el pequeño Olmo.

El niño del pueblo

"Desde que nació Olmo, todos han estado muy implicados con él. Le llaman el niño del pueblo. Están muy ilusionados y es para estar muy agradecidos. Es muy bonito ver la ilusión de los mayores con un niño. Le hacen regalos, todos quieren fotos con él y las señoras mayores se emocionan mucho. De vez en cuando hacemos alguna ruta por las casas de las personas mayores que no salen mucho para que lo vean", cuenta emocionada Belén Sesé.

Para que historias como la de Belén y Adrián puedan repetirse, la Junta de Castilla y León tiene puesto en marcha una serie de políticas y medidas para fomentar la natalidad bajo el nombre de El Plan Familias con las que poder revertir el saldo vegetativo negativo que un año más se ha registrado durante 2023, siendo esta una de las comunidades autónomas que menor tasa de nacimientos registra de nuevo.

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"Estos programas pretenden, por un lado, ayudar a las familias de Castilla y León a quedarse, pero también a venir a nuestra tierra. Es una apuesta, sobre todo, por las familias del medio rural. Castilla y León es una Comunidad Autónoma eminentemente rural, donde contamos con 2.248 municipios y solo 15 de ellos tienen más de 20.000 habitantes. Por ello, tenemos que centrar nuestros esfuerzos en nuestra población rural", explica Isabel Blanco, consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades.

De esta forma, la responsable de esta área afirma que lo que busca desde el ejecutivo regional es que, de una manera ágil y sencilla, las familias puedan acceder a todos los recursos y ayudas que la Junta de Castilla y León pone a su disposición y facilitar así su día a día. Entre estos programas destacan el Bono Nacimiento, que subvenciona los gastos que supone a las familias la incorporación de un nuevo miembro, sea por nacimiento o por adopción; el Bono Concilia, que dota de ayudas directas de 750 euros por hijo, destinadas a las familias con menores de 0 a 3 años a su cargo o el programa Conciliamos, cuyo objetivo es el cuidado y atención lúdica para niños entre los 3 y 12 años (hasta 14 cuando se trata de niños con necesidades específicas de apoyo educativo) en periodos no lectivos mientras sus padres trabajan

"Nuestro objetivo es ayudar a las familias a afrontar ese primer momento del nacimiento o adopción, ayudándoles con esos importantes gastos iniciales. Pero esta medida también busca favorecer la generación de empleo y generación de riqueza en nuestra Comunidad, ya que este Bono Nacimiento es para gastar en los establecimientos de Castilla y León", reitera Isabel Blanco.