Albert Rivera da por roto el acuerdo con el Gobierno sobre la aplicación del 155
Rajoy ha pedido al líder de la formación naranja que no dedique "sus energías a criticar al Gobierno en asuntos de Estado" y que "se comporte con la misma lealtad que el PSOE"
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Albert Rivera, de nuevo como verdadero jefe de la oposición en el Congreso, ha dado por roto el acuerdo con el Gobierno para aplicar la Constitución en Cataluña por no recurrir ante el Tribunal Constitucional el voto delegado de los independentistas prófugos. Mariano Rajoy prefirió no creerse la “supuesta desavenencia”, pese a la “escenificación” del presidente de Ciudadanos, a quien tildó de “aprovechategui” por buscar réditos electorales en un problema de Estado como es la intentona independentista contra la unidad de España.
El jefe del Ejecutivo explicó a Rivera que el Gobierno no recurre ante el Constitucional la decisión del Parlamento autonómico catalán de admitir ese voto delegado de Carles Puigdemont y Toni Comín porque los servicios jurídicos del Estado consideran que el Ejecutivo central no tiene legitimidad para hacerlo y porque hay precedentes en contra de esa iniciativa en el Constitucional. Además, recordó que el PP en la Cámara autonómica sí lo ha recurrido, igual que Ciudadanos.
“Como comprenderá, después de presentar 25 recursos contra decisiones del proceso, no hemos dejado de presentar el 26 para que usted haga esta pregunta”, ironizó Rajoy, para dejar claro que no se podía creer las 'acusaciones' de Rivera sobre favores del Gobierno a los secesionistas. "Esto le puede hacer perder votos y hacer que mucha gente no se lo tome en serio, porque ve que está usted de 'aprovechategui' en un tema importante", agregó.
Frente a esa afirmación de Rivera de dejar solo al Ejecutivo para defender el orden constitucional en Cataluña, Rajoy puso como ejemplo al PSOE e invitó a Rivera a comportarse con la misma lealtad que los socialistas en vez de dedicar sus energías a cargar contra el Gobierno en asuntos de Estado.
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La ruptura anunciada por el presidente de Ciudadanos se produce el mismo día en que el Consejo de Ministros ha decidido recurrir ante el TC la ley que la Cámara catalana aprobó la semana pasada para investir a Puigdemont como presidente de la Generalitat por la vía “telemática”, sin que tenga que acudir al Parlamento autonómico a presentar su candidatura ni sostener debate alguno con los grupos parlamentarios.
Después del enfrentamiento en la tribuna, Rivera insistió en los pasillos del Congreso en que Rajoy hace dejación de sus obligaciones en Cataluña al no tomar medidas para defender el castellano en la enseñanza o instar al TC a vetar el voto delegado, con lo que se reafirmaba en desmarcarse de la labor del Gobierno en la defensa del orden constitucional en esa comunidad autónoma. "Hasta aquí hemos llegado con esta displicencia", ha advertido. En todo caso, el líder de la formación naranja ha querido dejar claro que esta ruptura con el Gobierno no afectará a los Presupuestos Generales de 2018, unas cuentas, ha dicho, que ya están pactadas, sino únicamente a la aplicación del 155.
Albert Rivera, de nuevo como verdadero jefe de la oposición en el Congreso, ha dado por roto el acuerdo con el Gobierno para aplicar la Constitución en Cataluña por no recurrir ante el Tribunal Constitucional el voto delegado de los independentistas prófugos. Mariano Rajoy prefirió no creerse la “supuesta desavenencia”, pese a la “escenificación” del presidente de Ciudadanos, a quien tildó de “aprovechategui” por buscar réditos electorales en un problema de Estado como es la intentona independentista contra la unidad de España.