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El juez Ruz procesa a la cúpula de la Policía por colaborar con ETA en el caso Faisán
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RUBALCABA Y ANTONIO CAMACHO ESTABAN AL FRENTE DE INTERIOR CUANDO SE PRODUJO EL CHIVATAZO

El juez Ruz procesa a la cúpula de la Policía por colaborar con ETA en el caso Faisán

El juez Pablo Ruz ha procesado a Víctor García Hidalgo, ex director general de la Policía, al comisario Enrique Pamies, jefe superior de Policía del País

Foto: El juez Ruz procesa a la cúpula de la Policía por colaborar con ETA en el caso Faisán
El juez Ruz procesa a la cúpula de la Policía por colaborar con ETA en el caso Faisán

El juez Pablo Ruz ha procesado a Víctor García Hidalgo, ex director general de la Policía, al comisario Enrique Pamies, jefe superior de Policía del País Vasco, y al inspector José María Ballesteros por sendos delitos de colaboración con banda armada y revelación de secretos como presunto autores del chivatazo a ETA que en mayo de 2006, en pleno proceso de diálogo del Gobierno con la banda terrorista, frustró una operación policial contra la red de extorsión que operaba desde el bar Faisán de Irún. Los hechos ocurrieron cuando el hoy candidato del PSOE a la presidencia del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, era ministro del Interior, y su sucesor en el cargo desde ayer, Antonio Camacho, secretario de Estado de Seguridad. 

El procesamiento de la cúpula de la Policía es un serio contratiempo en la carrera presidencial de Rubalcaba y facilita al PP su tarea de desgaste. El entonces titular de Interior cesó a García Hidalgo poco después de que se conociera la filtración, pero mantuvo en el cargo al máximo responsable policial en el País Vasco, Enrique Pamies, y al inspector Ballesteros. Según el relato de hechos que hace el juez, éste entró en el bar Faisán la mañana del 4 de mayo de 2006 y entregó a su propietario, Joseba Elosua, un móvil a través del cual Pamies le alertó de la operación policial en marcha. El auto avala en su integridad la investigación llevada a cabo por un equipo policial, a cuyos integrantes acusaban los ahora procesados de ser los verdaderos autores del chivatazo. Una investigación que concluye que el móvil del mismo fue político y cuyos pormenores fueron avanzados en exclusiva por este diario.

El magistrado desbarata las coartadas de los procesados por falta de credibilidad. Así, por ejemplo, dice que la ofrecida por Enrique Pamies, quien afirmó que el cruce de llamadas con Ballesteros justo en el tramo temporal en que tuvo lugar la filtración nada tenía que ver con ésta sino con la preparación de una cita en el sur de Francia con un confidente. Coartada que Ruz, tras un elaborado razonamiento, dice que "carece de consistencia o coherencia en atención al devenir de los hechos que estaban ocurriendo durante los días 3 y 4 de mayo, ni obedece a criterios lógicos que puedan ser tenidos como razonables o verosímiles.

El titular del juzgado central de instrucción número 5 de la Audiencia Nacional dice en su auto que "la decisión de procesar a quienes hasta ahora figuraban como imputados en las actuaciones se adopta porque en las mismas aparecen motivos bastantes para afirmar con fundamento que (...) concurren indicios racionales de criminalidad" contra ellos. Y afirma que "los ahora procesados pudieron cometer delito de revelación de secretos y encubrimiento o colaboración con banda armada". No obstante, el juez recuerda que el auto de procesamiento es "una resolución de imputación formal y provisional". Los tres procesados prestarán declaración el próximo día 19.

El juez Pablo Ruz ha procesado a Víctor García Hidalgo, ex director general de la Policía, al comisario Enrique Pamies, jefe superior de Policía del País Vasco, y al inspector José María Ballesteros por sendos delitos de colaboración con banda armada y revelación de secretos como presunto autores del chivatazo a ETA que en mayo de 2006, en pleno proceso de diálogo del Gobierno con la banda terrorista, frustró una operación policial contra la red de extorsión que operaba desde el bar Faisán de Irún. Los hechos ocurrieron cuando el hoy candidato del PSOE a la presidencia del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, era ministro del Interior, y su sucesor en el cargo desde ayer, Antonio Camacho, secretario de Estado de Seguridad. 

Alfredo Pérez Rubalcaba José Antonio Camacho Ministerio del Interior