Los amigos empresarios de Rajoy

La selecta pléyade de empresarios que encarna a la derecha económica tradicional huele ya el cambio inminente de Gobierno y empiezan a prodigarse en gestos de acercamiento hacia el líder del Partido Popular. Es cuestión de tiempo, como les insinuó el propio Mariano Rajoy en un desayuno informativo celebrado con ellos el pasado mes de junio en el que aseguro estar preparado “para asumir la responsabilidad de Gobierno en cualquier momento”. 

Rajoy cuida sus relaciones con las grandes familias de la economía española y con los empresarios más destacados, pero se ha blindado lo suficiente como para mantener al principal partido de la oposición a salvo de los intereses particulares de cada uno de ellos. Con todos es cordial, a todos escucha y atiende respetuosamente en su despacho de la planta noble de Génova 13 y con todos cultiva una relación fluida. Pero no va más allá. Pocos o tal vez  ninguno podrán presumir de formar parte de una camarilla privilegiada. 

Como explica el periodista Graciano Palomo en el libro El hombre impasible, Rajoy no es muy dado a dejarse influenciar por los dueños de las finanzas. “No suele aceptar sus invitaciones a cenas privadas en sus flamantes domicilios, ni es habitual de sus saraos, ni de cacerías ni yates. “¡Les conozco demasiado bien!, dice”.  

“Se ve con todos”

Sus más estrechos colaboradores corroboran esa imagen de hombre sin ataduras que rehúye esos cenáculos propios del poder. “Rajoy se reúne con prácticamente todos los empresarios del IBEX-35”, explican. “Habla con todos y no es dado a tener un grupo selecto a los que trate de forma especial o preferente”.

Toda esa labor de contactos y tomas de temperatura transcurre dentro del “hermetismo de Génova”. “Los empresarios suelen venir a informar de sus operaciones, de sus planes de fusión, de sus inversiones. Le mantienen al tanto de lo que van a hacer y le cuentan, sobre todo, los problemas que encuentran en el exterior. Probablemente, a raíz de la crisis se han intensificado mucho los contactos con todos ellos”. 

El economista Luis de Guindos, ex secretario de Estado de Economía entre 2000 y 2004, es una de las figuras claves. Desde su actual puesto de responsable en España de la división financiera de Price Waterhouse, sigue siendo uno de los asesores de confianza de Rajoy. El presidente del PP le consulta casi todas sus medidas económicas y le suele sondear cuando tiene que hacer alguna declaración específica.  Una confianza que muchos empresarios han sabido aprovechar para utilizar a De Guindos como puente para llegar a Rajoy. Algunos directivos de cajas de ahorros han conocido, por ejemplo, el despacho de Rajoy de la mano del propio economista.

“Cuando Rajoy dice que no debe nada a nadie y que no tiene ataduras creo que también es un mensaje dirigido a un determinado sector económico de este país, a los plutarcas tradicionales”, explica un diputado. “Pero una de las virtudes de Rajoy es que no acepta determinados juegos de intereses. Y eso es algo de lo que puede hablar su equipo económico. Hay una pulcritud y una independencia de criterio muy clara, como hemos visto  en temas como la enmienda para el rescate de las concesionarias de las autopistas, a la que nos hemos opuesto, o con la enmienda Florentino, que tampoco apoyamos a pesar del trabajo de lobby descarado que  hizo el propio Aznar”. 

“Sé que se ha visto alguna vez con los Escarrer, de Sol Melia, o que hace poco estuvo con el presidente de Farmaindustria, Jordi Ramentol. Con José Manuel Entrecanales no hay ninguna relación y con Florentino Pérez dudo que tenga mucha”, añaden.

El amigo Sánchez Galán

“Rajoy es bastante independiente pero muy cordial con todo el que le llama”, corrobora la propia Fátima Báñez, miembro de su equipo económico en el Congreso. “Nosotros que trabajamos con él no notamos que tenga una mayor o menor afinidad y simpatía personal por algunos empresarios”. 

Muchos, sin embargo, señalan al presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, como uno de los que sí podría ser considerado amigo personal de Rajoy. En la relación que él pueda tener con Galán juega un papel importante Fernando Bécker, director de recursos corporativos de la compañía y ex consejero de Economía en el Gobierno de Castilla y León con Juan José Lucas y cercano a la FAES de José María Aznar.  

Sea como fuere, los empresarios comienzan a acercarse más hacia quien acumula méritos para convertirse en el próximo vecino de la carretera de La Coruña. El primero en sumarse al nuevo caballo ganador ha sido el banquero más importante de España, Emilio Botín, durante años  muy próximo a Zapatero y que todavía hoy se mueve como pez en el agua en la esfera monclovita.