El asesino de Pagazaurtundua, delatado por sus compañeros y su ex novia

La Ertzaintza ha conseguido identificar al presunto asesino de Joseba Pagazaurtundua por el testimonio de varios etarras. Compañeros de su equipo de rugby, miembros a su vez de comandos, y su ex novia le han delato ante la Policía.

Aitziber Ezkerra no ha seguido la estrategia ordenada por ETA. Llegó el viernes, tras su detención el pasado martes, al despacho del juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska y estuvo durante algo más de dos horas contestando a sus preguntas. Este comportamiento no es habitual en miembros de la banda terrorista que se niegan a declarar y únicamente alegan torturas por parte de la Policía.

Pero Ezkerra vio una posibilidad de no ir a la cárcel y la aprovechó. Eso sí, dejando a las puertas de los leones a su ex pareja sentimental y presunto asesino de Joseba Pagazaurtundua, Gurutz Agirresarobe.

Ante el magistrado y con un abogado de oficio, esta mujer insistió en el interrogatorio que a lo largo de 2003, cuando fue asesinado el jefe de la Policía Local de Andoain, Agirresarobe, con el que convivía, le comentó su vinculación con ETA. Entre otras cosas, le comentó que la organización le exigía convertirse en miembro liberado, dejando de ser legal, a lo cual se negaba.

Con esta declaración, Ezkerra ha conseguido que el juez le haya impuesto únicamente una fianza de 30.000 euros para evitar la cárcel. Eso sí, a su ex pareja se le complican las cosas.

A pesar de su intento por desvincularse de la banda, su ex novia ya ha confirmado que en el año que mataron a Pagazaurtundua él era un miembro de ETA.

Las pruebas contra él cada vez son más sólidas. Su ADN ha sido clave para el avance de la investigación. El día que fue a matar al jefe de la Policía le estaba esperando en el bar donde iba siempre, Daytona. Le esperó tomando un café en la barra y cuando había sólo tres personas en el local, le asestó cuatro disparos en puntos vitales que acabó con su vida de forma inmediata.

El equipo de rugby, clave

Sus huellas las dejó en la taza aunque a lo largo de todo este tiempo su ADN no se había podido relacionar con él. La siguiente prueba clave para la Ertzaintza, encargada de la investigación, fue el equipo de Rugby de Hernani. Junto a Agirresarobe, lo formaban varios miembros de la organización terrorista que dieron su nombre tras ser detenidos por su pertenencia a un comando en la zona de Guipúzcoa.

La desarticulación de este comando fue en marzo de 2009 y cayeron Manex Castro Zabaleta y Beinat Aguinagalde, presunto asesino de Isaías Carrasco, entre otros. Sus testimonios abrieron otra vía de investigación y la Ertzaintza comparó su ADN, recogido posteriormente, con el de la taza del bar.

Pero por si no era suficiente, Grande-Marlaska quiso corroborar él mismo que su perfil genético coincide con el asesino de Pagazaurtundua, por cierto identificado por tres testigos presentes en el local. El juez le ofreció el viernes durante la declaración una botella de agua y mandó a sus funcionarios que corroboraran de nuevo sus huellas.

Efectivamente, todas las pruebas apuntan a Agirresarobe como el asesino de jefe policial de Andoain y el magistrado ha acordado enviarle a prisión por los delitos de integración en organización terrorista, asesinato terrorista y tenencia ilícita de armas.

Sin embargo, en el auto de prisión el juez no le relaciona con la muerte del senador del PP por Aragón, Manuel Giménez Abad, asesinado dos años antes con la misma pistola que acabó con la vida de Pagazaurtundua.