Puras se va de vacaciones en plena negociación con NaBai y pone en bandeja el Gobierno de Navarra a UPN

Ferraz le ha puesto una vela a San Fermín y el patrón navarro no le ha defraudado. El acuerdo entre el Partido Socialista de Navarra (PSN) y Nafarroa Bai (NaBai) se aleja a pasos agigantados después de que la coalición nacionalista haya constatado como el candidato socialista, Fernando Puras, rehuye desde hace días una nueva reunión con Patxi Zabaleta para concretar el reparto de consejerías que permita la formación de un nuevo Gobierno en la Comunidad Foral. Según fuentes de la NaBai, el último encuentro entre ambas partes, al que también asistió la tercera pata de un hipotético tripartito, IU, tuvo lugar el pasado 5 de junio. Desde entonces, todas las llamadas para concertar una nueva cita se han encontrado con una sorprende respuesta por parte del PSN: “Puras está de vacaciones”.

Esto se produce a menos de una semana de que la presidenta del Parlamento Navarro, la socialista Elena Torres, haga la definitiva ronda para proponer un candidato a la Presidencia, por lo que los dirigentes de la coalición se han terminado por convencer de que finalmente el PSOE ha impuesto a sus compañeros navarros su posición contraria al pacto. De hecho, están seguros de que la última propuesta que les hizo Puras de formar un Ejecutivo con mayoría de consejeros independientes y sólo dos carteras para NaBai -en concreto, la de Bienestar Social y Agricultura- no era más que un intento del candidato socialista de que fuera la formación de Zabaleta la que rompiera las conversaciones para justificar ante su militancia una futura abstención que permitiera la reelección del actual presidente de UPN, Miguel Sanz.

Dirigentes de la coalición nacionalista insisten en que el acuerdo con las líneas básicas del futuro Gobierno tripartito ya se cerró y que, de hecho, Zabaleta y los suyos aceptaron sacar de él todos aquellos puntos de su programa electoral que creaba suspicacias a los socialistas navarros para hacerlo posible. Incluso, como adelantó este diario el pasado 8 de junio (ver noticia), el propio líder de la coalición renunció a ir como consejero en el futuro Ejecutivo para evitar que los contrarios al pacto utilizaran su condición de antiguo miembro de Herri Batasuna para torpedear las negociaciones.

Presiones de Ferraz

Precisamente por ello, la falta de respuesta a sus llamadas de los últimos días ha terminado por sumir en el pesimismo a la dirección de Nafarroa Bai. “Ferraz y sus encuestas han ganado”, recordaba ayer uno de sus dirigentes en referencia a la información de El Confidencial del pasado 5 de julio (ver noticia) en el que se recogía el temor del PSOE a que el pacto le quitase “tanto votos como De Juana”. La tercera pata del hipotético tripartito, IU de Navarra, también mostraba sus recelos: “Es verdad que ya se ha llegado muy lejos y que, en condiciones normales, el Gobierno de coalición debería ser posible, sobre todo por el respaldo que tuvo en el Comité Regional de los socialistas navarros. Sin embargo, tenemos serias dudas de que el PSN sea capaz de aguantar las presiones de Madrid”.